𝐆𝐄𝐓 𝐈𝐍𝐓𝐎 𝐈𝐓 [𝐒𝐎𝐎𝐊𝐀𝐈]

♡SHATTERED♡

SHATTERED!

HÍBRIDOS
LIGERO GORE
BOY PUSSY

SOOBIN BOTTOM

ੈ✩‧₊˚

Soobin era algo distraído, dicho en palabras no ofensivas era lo que le seguía de torpe.

De alguna manera que ni siquiera él entendía logró perderse en el bosque, su lugar de nacimiento y en el cual había habitado su vida entera hasta ese momento.

Tontamente se había separado de su familia mientras cruzaban por el río en busca de alimento, y por más que salto y salto para intentar encontrarlos entre todos los árboles y arbustos, simplemente le fue imposible.

Y ahora, gracias a eso debía averiguar a que parte del bosque había ido a parar sin saberlo.

Solo para estar seguro si era necesario comenzar a rezar por su vida a su Dios conejo o en el mejor de los casos lograr ubicarse y partir con dirección a su madriguera.

—disculpe! —chilló tímidamente el pequeño conejo blanco.

Soobin rápidamente empezó a saltar en dirección al diminuto animal color café que se encontraba subiendo a lo alto de un gran árbol.

—¿qué? —responde la malhumorada ardilla sacando una de las bellotas de su boca para poder hablar con el otro mamífero de grandes orejas.

—¿sabe en qué parte del bosque estamos? —pregunta mirando a todos lados con algo de desconfianza, sentía que algo aterrador estaba mirándolo desde lejos.

—... ¿Estás perdido? —sus orejitas tiemblan al igual que su esponjosa cola al suponer lo peor para un pequeño conejito indefenso.

—probablemente..

Soobin estaba avergonzado, nunca antes había sido tan tonto como para perderse camino a su casa y ahora, justo ahora lo había hecho.

—a menos de que puedas trepar un árbol o volar, te recomiendo huir de inmediato, este es territorio de lobos.—la ardilla suspira pesadamente mientras sigue subiendo el árbol hasta un pequeño agujero donde deja caer las tres bellotas que estaba llevando para alimentarse.

—ay no... —esa palabra había sido tan satánizada dentro de su madriguera que el simple hecho de escucharla le provocaba miedo.

Un lobo era como la mismísima muerte para un conejo, ellos vivían aterrados de alguna vez toparse con uno y ese tonto conejo de ojos azules había caído justamente en el territorio de una manada.