[Pero nadie respondió]

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Aquel triste día fue difícil de superar... No solo por el funeral de la Jefa... SI NO PORQUE VI A CÉSAR ASUSTADO!!! CÉSAR NUNCA SE HABÍA PUESTO TAN TENSO COMO AHORA!!!

Qué había pasado?! Qué narices?! LO DESCUBRIREMOS EN ESTE CAPÍTULO!!! Digo... Sigo?

César venía corriendo hacia mí con la cara chorreando sangre. Yo me sequé las lágrimas con el traje y corrí a ver que ocurría. César estaba muy tenso y nervioso. Tenía los ojos brillantes y los dedos quemados. 

—QUÉ NARICES HA PASADO?! De normal soy yo el que se va y vuelve lleno de sangre... 

César no dijo nada. Me agarró y me llevó a rastras hacia casa. Por el camino pasábamos por las calles y la gente nos miraba. César chorreaba sangre por el camino y poco a poco aceleraba su paso. De pronto vi que algo nos seguía. Él miraba hacia todos los lados y yo me di cuenta que unas setas nos seguían. Eran aquellas setas de cuando todo esto empezó.

No iban muy deprisa, pero nos seguían.

—César, creo que nos siguen unas se-

—ALTO AHÍ!!! JADJAJJDJAJAJAJDJAJDADJAHJDHANSKJCNKWAKJNCMAKJ!!!—Una chica con pelo oscuro y largo vestida de militar (con hongos por todo el cuerpo) nos detuvo.—VOSOTROS!!! Especialmente tú, César!!!

La chica señaló a César con una mueca malvada. Se acercó un poco y le dijo:

—Tú has visto a Jack Ross, verdad?... DÓNDE ESTÁ!?!?—Gritó con una cara muy perturbadora.

César no se molestó en responder, prendió un poco de fuego y le dio un golpe para que se apartase. La chica intentó incorporarse, enfadada, pero seguía sonriendo malévolamente. 

—Eh eh eh! Tú no me quitas de en medio eh?—La chica señaló de nuevo a César.—Dime dónde está Jack!!!

Ella se empezó a enfadar.

—Pero tú no nos buscabas a nosotros?—Dijo César.

—BUENO, PERO JACK ES JACK!!!—Estaba loca.

Se notaba que la chica estaba MUY interesada en Jack Ross. Espera, tenemos licencia para meter a Jack Ross en la historia? Meh, supongo que sí. Joana, tranquila, te doy créditos. Siguiendo con el tema, la chica se estaba poniendo nerviosa.

—Oye no, dime dónde está Jack.—Dijo, esta vez con un tono diferente.—Nadie me toma en serio tío... VOY A TENER QUE HACERLO A LA FUERZA O QUÉ?!?!?

—Te aseguro que no le quieres conocer...—Dijo César, con la misma mirada que cuando le vi hace unos minutos.

—Sí que quiero.

—No, no quieres.

—QUE SÍ QUIERO

—Por cierto... Quién eres?—Intervine su discusión.

—YO?!—La chica estaba descontrolada.—JDAJDAHDJAHDJHAMJDSNAJNDAJ (risa rara), YO?!

La chica me daba un poco de miedete. Por lo menos no nos había atacado (aún).

—Yo soy Ánchel, encantada.—Ahora sonreía amablemente.—Y tú? Puerro, verdad?

—Opa, soy famoso. 

—Bueno, que dónde está Jack.

—NO TENGO NI PUTA IDEA, TE SIRVE?! TÚ VES ESTA SANGRE?! CREES QUE TENGO TIEMPO?!—César ahora era el que se había descontrolado, y os puedo asegurar que no es muy divertido un César descontrolado.

Ánchel le miró con furia y muchos polisetas aparecieron. En grupo intentaron agarrarnos. César se resistió sacudiendo sus brazos y generando fuego. Los polisetas se volvieron polvo al contacto con el fuego. De pronto, aquel polvo se recompuso en más polisetas. Esta vez llegaron a bloquear a César y yo como estaba cansado decidí rendirme también.

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