Capítulo 25

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El nudo se desinflamó al cabo de un buen rato, Mina y Nayeon permanecieron juntas, sonriendo y soñando despiertas, fantaseando con los cachorros que podrían venir, construyendo un mundo que nadie podría derribar.

―Imagina un niño con tus lindos ojos, con su piel pálida y su carita redonda, sería nuestra bolita de nieve. ―sonrió de solo pensarlo.

―Que sea adorable como tú, con tu cara pequeña y tus bellos labios. ―apretó los labios de Mina con su dedo índice y pulgar, besando estos. ― ¿Cómo le llamaremos?

―Byeol, significa estrella, él o ella será nuestra estrellita, Myoui Byeol. ―sonrió satisfecha.

―Suena bien, me agrada. ―Nayeon hizo silencio escuchando a su estómago rugir, ―Alfa tengo hambre. ―dijo en un muy tierno aegyo.

―Vamos a ver qué podemos hacer bebé. ― se levantó de la cama.

Nayeon le siguió, pero se detuvo al ver que Mina se agachó de espaldas a ella.

―Súbete bonita. ―señaló a su espalda.

La omega subió con cuidado y fue levantada por la alfa, quien tambaleó pero se incorporó rápido. Caminó a las escaleras sosteniendo las piernas de Nayeon con firmeza. Y la mencionada aferrándose al cuello de la pelinegra.

―Eres como una niña pequeña, ― la miró de reojo, enternecida. Nayeon hizo algunos bonitos sonidos que le derritieron aún más el corazón. ―Ya es un hecho, estás chiquita.

Bajaron entre risas, el ambiente era muy animado. Mina dejó a la omega sentada en la mesada de la cocina.

― ¿Qué te gustaría comer? ―preguntó parada frente a ella, con las manos apoyadas sobre la mesada a cada lado del menudo cuerpo.

―Un sándwich y una mandarina. ―sonrió.

―Bien pero calma, primero cenas y luego el postre, ―frotó con suavidad su nariz en la de Nayeon, en un pequeño beso esquimal.

―Bien pero calma, primero cenas y luego el postre, ―frotó con suavidad su nariz en la de Nayeon, en un pequeño beso esquimal

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En otra parte de la ciudad el clima no era tan cariñoso, las tensiones dominaban el ambiente. Momo le marcó al teléfono de Chaeyoung para reunirse, aún tenían mucho que aclararse.

― ¿¡Porque tuviste que ir y decirle todo!? ―gritó la alfa.

―Yo sí tengo conciencia, ni siquiera la conocía, ¿Entiendes eso? Le hice mierda la vida a alguien que nunca me hizo nada. ―habló entre dientes, mascullando la culpa.

―Al contrario Son, le hiciste un favor, gracias a ti ahora tiene una alfa nueva. Ojalá mi hermana nunca nos hubiera metido en esto. ―bufó golpeando su mano cerrada contra la mesa.

―Es mi culpa, debí entender que Somi era una imbécil. ―la omega seguía culpándose. Suspiró y miró a la más alta. ―Dime ya, ¿Quién es esa mujer? ¿Acaso no recuerdas algo?

Infidelidad [Adaptación Minayeon]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora