numero dieciséis

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Aun guardo esa rosa que me diste  , pero ahora está marchita,  sin vida , aún está guardada como un recuerdo de ti , recuerdo que solo esta en mi mente porque ya no estas aquí

Aun guardo esa rosa que me diste  , pero ahora está marchita,  sin vida , aún está guardada como un recuerdo de ti , recuerdo que solo esta en mi mente porque ya no estas aquí, 

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Es rara esta sensación,  estoy despierto pero mi cuerpo no , el doctor dijo que eso se debe a los tranquilizantes que me aplicaron para evitar el dolor en mi piel .
Podía mover muy leve mis dedos pero aun con todo la anestesia en mi cuerpo , me dolía muy levemente . Los párpados me pesaban que prefería tener los ojos todo el tiempo cerrados .

Me habían hecho varios exámenes y todo estaba a la perfección a excepción de algunas quemaduras y ... mi rostro , el doctor me había dejado los vendajes en mi cara , solamente me dijo que era para proteger mi piel que había quedado sensible.

Escuche el sonido de la puerta abrirse , pero no le tomé mucha importancia, por que quizá solo fuera una de las enfermedades que venía a verme para asegurarse que todo este bien .

- hola -  es escucho cerca de mi cama .

Levante la miraba encontrándome con aquellos ojos ámbar y una sonrisa dulce que lo caracterizaba muy bien .

-(n/m) - murmure por lo bajo .

- el doctor dijo que pronto saldrías del hospital - soltó mientras se sentaba a mi lado .

- akane.. akane como- .

- akane-san - me interrumpido- su estado.. esa aun muy delicada por las quemaduras en su piel - agachó su miraba .

- .. ya veo - solté.

- el doctor vendrá a quitarte la venda de la cara - sonrió con dulzura mientras tomaba mi mano .

Por instinto lleve mi mano a mi rostro , más preciso el lado que tenia aún vendajes .

- todo estará bien sei - llevo su mano a mi rostro - eso te lo puedo asegurar - sonrió mientras daba pequeños masajes a mi mejilla.

- no lo se (n/m) - suspire - tengo miedo de ver que hay debajo de las bandas y no poder reconocerme - mi labio temblaba .

Sentí como tomaba mi mano y la enlazaba con la suya , levante la miraba encontrándome con la ajena quien me sonreía.

- no tienes porque temer , seguirás siendo el mismo Seishu de siempre o bueno eso es para mi - río levemente .

- gracias - sonreí.

Unos pequeños golpes a la puerta , para luego entrar el doctor a mi cuarto . Llevaba con sigo su típica bata blanca , el cabello acomodado y con una ligera sonría a la final era a un par de niños a quienes a tendía.

un amor inocente - inupi x male reader Donde viven las historias. Descúbrelo ahora