•𝙻𝙰 𝙻𝚄𝚉 𝙳𝙴 𝙼𝙸 𝚅𝙸𝙳𝙰•

1.2K 121 33
                                    

Una semana antes de navidad


—Voy a cambiar mi número de teléfono y mi nombre así que no te molestes en buscarme, dejaré un poco de dinero en tu tarjeta para que te las arregles, pero luego no quiero que me pidas nada, ¿entendiste?

No dije nada solo asentí mientras veía como guardaba sus cosas en una maleta bastante grande.

—No tienes documentos legales así deberás hacerlos, yo me llevaré los míos... no me importa como hagas, pero no quiero que digas que soy tu madre, te puse ese apellido inventado para que no te relacionen conmigo.

—Está bien...

Era cierto, "Heisuke" no era mi apellido, solo lo uso para que la gente pueda distinguirme... yo no tenía apellido legal y ni siquiera sabía el de mi madre.

—Bien, ya me voy... — se colocó unos lentes negros y un pañuelo en su cuello con marcas y hematomas. Era obvio lo que pasó, tuvo problemas con la gente que trabajaba y tenía que huir.

—Si.

—Tu padre murió hace un par de años, así que tampoco puedes buscarlos... creo que tuvo un hijo pero no tengo idea si sigue vivo, no recuerdo su nombre... Ka... kuko? o algo así, bueno tienes un hermano.

No le prestaba atención la verdad, estaba shock, pensando en que esta mujer era capaz de dejar sola a una menor de edad.

—Hasta pronto ________, no quiero verte nunca más...— dió un portazo al salir por esa enorme puerta de madera que estaba en la entrada de nuestra... bueno, ahora mi casa.

Caí de rodillas al suelo, las lagrimas no demoraron en hacerse presentes estas caían de mis ojos cómo cataratas, la leve brisa que se produjo por el portazo flameó mi cabello y un largo suspiro salió sin permiso de mis labios.

—Por fin...

Paz.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—Te extraño mucho...— encendí el sahumerio y di comienzo a mi rezo juntando ambas manos de rodillas —Es el primer año nuevo que no pasamos juntos... 

—Baji era muy importante para ti, no ________?— bajó la cabeza en señal de respeto a un lado de mí, luego copió mi acción arrodillándose a la par —Estabas enamorada de él...

—Él era importante para mí, pero no solo por algo romántico... crecimos juntos, Keisuke me conocía de pies a cabezas, me ayudó siempre que lo necesité y me enseñó muchas cosas... su muerte fue un golpe muy duro, yo lo amaba en todos los sentidos posibles... Tú seguro lo entiendes, Chifuyu.

—Te entendiendo a la perfección...— sus hebras cubrían sus ojos, estaba triste.

—Bueno, ya basta, de sufrimiento...— me paré arreglando un poco mi "vestimenta especial" o sea un kimono, vestimenta que Mitsuya me obligó a usar porque es año nuevo —Baji seguro nos diría algo cómo "dejen de llorar, se parecen a Tikimichi"

𝚄𝚗𝚊 𝚌𝚑𝚒𝚌𝚊 𝚎𝚗 𝚃𝚘𝚞𝚖𝚊𝚗 | 𝚃𝚘𝚔𝚢𝚘 𝚁𝚎𝚟𝚎𝚗𝚐𝚎𝚛𝚜 卍 ¡EN CURSO!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora