CAPÍTULO 28

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Hetaro se dirigía a toda prisa al Mercado Negro. Había recibido una llamada de Viktoria, Sarah había despertado y Jason estaba en un calabozo. No entendía lo que había ocurrido pero debía ir hacia allí rápido.

En el camino se cruzó con Tristán y Lailah que también parecían alterados. Entraron en el Mercado y se dirigieron hacia la parte ilegal de este.

El Mercado seguía plagado de policías. Sarah y Jason habían estado inconscientes durante cuatro días enteros. En todo aquel tiempo, la seguridad de Tres Ríos se había visto reforzada. Solfael había mandado dos legiones enteras y las patrullas se habían intensificado. Tartiel había reclutado a nuevos miembros de policía y parecía que los Ascenvakir se estaban reponiendo con rapidez del golpe.

Pese a esa presunta rapidez, el golpe moral seguía en las mentes de todos. La cúspide de la seguridad había sido atacada y destruida. Las obras, en manos de los excelentes enanos, avanzaban a buen ritmo. Pronto, el DCPTR estaría de nuevo en marcha.

Lo malo de todo eso era la cumbre que había sido convocada en dos semanas desde el ataque. Habían pasado cuatro días, por lo que sólo quedaban diez para que comenzara.

Una cumbre que ocurriría en el Ayuntamiento de Tres Ríos, entre los principales líderes de los barrios para que discutieran sobre Eclipse y las medidas a tomar. La cumbre contendría a todas las razas. Irían los respectivos líderes y un acompañante a cada uno.

Representando a los vampiros, irían él y su hermana, Hyliana; representando a los cambiapieles, Eleanor y Lailah; representando a los feéricos, Lord Hemalen y Alahrun, cuya presencia había venido de lujo al pueblo de los bosques, ahora se sentían más seguros con su príncipe en la ciudad. A los mortales los representarían La Alta Comerciante Naryu y Don Velatos, enana y archimago, respectivamente; los tritones estarían representados por Tristán ,Anya y Merusia. Por último, los Ascenvakir tendrían a Solfael y Tartiel en la cumbre junto con las Tres Tempestades. Nada más que cinco arcángeles para representar a su pueblo. Los Ascenvakir eran muy vanidosos.

Lograron sortear a la policía y entraron en el Mercado Negro.

Tristán preguntó:

-¿Sabeis acaso lo que ha pasado con Jason?-

Hetaro negó con la cabeza. Lailah habló:

-Ely me dijo que había atacado a Sarah, pero no dio más detalles.-

Hetaro entrecerró los ojos, debía de haber una explicación para aquello. Lailah pareció que iba a decir algo más pero calló. Tristán se dio cuenta.

-¿Ibas a decir algo más?-

Lailah suspiró.

-Sarah y Jason tenían una buena relación, para haber convivido tan poco, acabaron construyendo un gran vínculo. Todavía no me creo que él la haya traicionado.-

Tristán asintió, apenado. Hetaro se dirigó a ambos.

-Vayamos y que nos cuenten.-



Sarah devoraba la comida de su plato. Se podría decir que la engullía. Viktoria no paraba de reír.

-Vaya vaya, alguien tenía mucha hambre.-

Alahrun sonrió.

-Ha estado cuatro días sin alimento, raro es que siga en pie.-

Viktoria le miró y le riñó:

-Es que es una muchacha fuerte.-

-Y hambrienta.-Completó Wimmug.

Los tres Arcanos volvieron a reír.

Eleanor observaba la escena aún algo confusa. Todavía le costaba creerse que aquellos tres fuesen figuras de inmenso poder y magia. Era bonito sin duda, ver una familia así. Una familia, comprendió, de la que ella formaba parte.

RAZAS, LINAJES Y CASTASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora