CAPITULO VII

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Estaba sentada con mis amigas mientras comíamos, ellas hablaban de muchas cosas que la verdad no puse nada de atención, estaba distraída, en algo más, en alguien más.

—¡Helen!— Reaccione y parpadeé varias veces ya que Jane me había gritado y pasado la mano por delante de la cara.

—¿Que pasó?— Contesté.

—Llevas toda la plática con la mirada perdida en lo que sea que estés viendo o pensando.— Jane me movió el brazo para que volviera a reaccionar.

—Para ya, solo estoy pensando en lo que haré hoy después de clase.—

—Llevas días disociándote de todo, parece que algo te tiene pensando y para mi que es algo que llevas ocultando.— Dijo Lee.

—No me gustan los interrogatorios.— Las mire un poco mal y empecé a comer.

—Mala suerte, te toca responder.— Sonríe orgullosa Jane.

—¿Pueden dejarme comer en paz?— Las mire y ellas solo guardaron silencio, —Gracias.— Suspiré y volví a comer mientras miraba hacia la sala de maestros donde estaba Andrew, no sé qué estaba pasando pero si estaba pensando en algo, era en el, el me tenía pensándolo.

—Helen, ¿ocultas algo?— Lee me tomo de la mano, la mire a los ojos y negué con la cabeza.

—Estoy bien chicas, solo me agobia un poco los interrogatorios, nada más.— Dije más calmada.

—Hoy hay una fiesta, lo repito por si no escuchaste.— Jane me vió, —Será a las 7
de la noche, en la casa de Ethan.— Se mordió el labio.

—¿La fiesta es de el?— Levanté una ceja.

—Aja, ¿no te dijo?— Lee se sorprendió.

—Mmm, no la verdad.— Se me hizo algo bastante extraño ya que Ethan siempre me cuenta o me invita a todo pero probablemente se le olvidó.

—Bueno, tal vez te lo dice hoy y te especifica cómo será.— Sonríe Lee y se levanta, la hora de comer ya se había acabado y teníamos que regresar a clases.

Me despedí de ellas con un abrazo y camine al salón que tocaba.

—Helen, espérame.— Revise por arriba de mi hombro y era Ethan que venía caminando rápido, me detuve hasta que se acercó lo suficiente, —No sé si ya te enteraste pero haré una fiesta, irá toda la generación y no podías faltar tú.— Ethan me dio una sonrisa tan amigable que lo caracterizaba mucho.

—Me encantará estar ahí, cuentas conmigo.— Mi respuesta lo emocionó bastante y me dio un abrazo fuerte.

—Ahí te veo, ya no te entretengo tanto para que no llegues tarde, nos vemos.— Me choco la mano y se fue.

La puerta del salón que me tocaba estaba cerrada, decidí entrar y no había nadie, estaban las luces apagadas,revisé mi horario en mi celular y fue cuando me llegó un aviso que la clase se había cancelado.

—Señorita, ¿que hace metiéndose al aula sin permiso?— Reconocía esa voz tan ronca y fría, me di media vuelta y era el profesor Marchetti.

—Llegaba a mi clase pero no hay nadie, se cancelo y apenas me enteré.— Cerré la puerta y lo miré.

Andrew posó su misma mirada fría y penetrante en mi, como el primer día, lo sentía igual, nada ni nadie podía quitarme la sensación de miedo que eso causaba en mi.

—No puede ingresar sin permiso.—

—Disculpe, no volverá a pasar.— Me hice a un lado y el miro por las ventanas, lo observé lentamente y cuando él se dio cuenta me hice la tonta en mi celular.

Tú eres mi secreto (+21) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora