Your Voice. Junghope

FINAL

Es lo que me haces sentir,

lo que me haces pensar 

y desear

  lo que me hace delirar y creer que

cuando te vuelva a tener,

será mejor que la última vez.

—MelhaDragon

🤍

Una cabaña lujosa con una piscina junto a una mesa con velas, solo ellos dos y un Jungkook con mirada fija sobre él, no era muy tranquilizante.

Habían pasado ya unas semanas, su nueva vida era definitivamente un sueño. Jungkook era maravilloso con él, nuevos amigos en su trabajo y la compañía constante de Jimin, era mucho más de lo que podía pedir.

La cena fue increíble, Jungkook no paraba de elogiarlo y hacerlo sonrojar. No se había imaginado lo difícil que era sostenerle la mirada. Pero es que su novio parecía estar viendo un trozo de filete sentado frente a él, aunque no lo juzgaba, lo que había pasado antes de su operación no se había vuelto a repetir.

Pero Hoseok se sentía tan nervioso por eso, ahora que podía ver resultaba todo un poco más difícil por alguna razón.

Más tarde luego de cenar se sentó en una de las sillas junto a la piscina, Jungkook se había metido a nadar un poco. Él no había querido meterse pues estaba algo nervioso, tenía años que no se metía a una piscina, pero en estos momentos parecía tentadora esa oferta.

De un momento a otro su plática se volvió un tanto extraña, cada uno preguntaba cosas inesperadas para recibir respuestas inusuales.

—¿No has probado la gelatina de limón? —Jungkook negó ante la pregunta de Hoseok.

—Me dicen que sabe dulce pero yo realmente siento que va a saber ácida, así que jamás la he probado —Hoseok rió con esa respuesta, Jungkook podía ser inesperado a veces.

—¿Cómo aprendiste a nadar? —le preguntó. Jungkook se acercó al filo de la piscina y recargó sus codos. Las gotas de agua acariciando su piel.

—Realmente no me acuerdo, supongo que desde chico, mi madre amaba nadar así que seguramente ella fue la que me enseñó.

Hoseok suspiró—. Se ve divertido.

Jungkook tomó su mano con cuidado.

—¿Quieres entrar? —lo pensó.
Bajó la mirada y él pareció entender pues le sujetó la otra mano y comenzó a jalarlo con cuidado. Metió sus pues primero y luego Jungkook lo tomó de la cintura y lo ayudó a entrar. 

El agua estaba de una muy buena temperatura y noche no era tan fría. Jungkook lo soltó y solo era sostenido por su mano.

Podía tocar el fondo pero el agua le llegaba hasta el cuello y por momentos sentía que se ahogaba, pero con ayuda de su novio poco a poco fue agarrando confianza y ahora flotaba más en el agua.

Jungkook lo pegó a su pecho y su respiración se aceleró. Le gustaba mucho.

Jungkook era demasiado atractivo. En verdad estaba enamorado de él. Desde que recuperó la vista no tuvo mucha oportunidad de prestarle demasiada atención al rostro de Jungkook, se sentía apenado y no quería hacerlo sentir incómodo, pero estando en este momento así de cerca, podía prestar atención a varios detalles que solo le hacían saber que su novio era muy guapo.

—¿Sabes?, cuando estamos así de cerca, no dejas de mirarme de esa manera, no sé qué es lo que piensas, pero me gusta el brillo que hay en tu mirada.

Enredó sus brazos en el cuello contrario.

—Pienso que en verdad me gustas, mucho —le dijo. Jungkook sonrió con nerviosismo.

—Pensé que estarías pensando en cómo quitarme el traje de baño debajo del agua —Hoseok le golpeó el pecho con la mano y se sonrojó levemente.

—No es lo que estaba pensando pero esperaba que fueras tú el que me quitara el traje —Jungkook levantó las cejas sorprendido por su comentario pero después lo besó con cuidado. Sintió que era empujado hasta una orilla de la piscina y acorralado ahí. Su novio comenzó a quitarle el traje de baño y su corazón dio un brinco por la emoción.

Las manos contrarias lo recorrían por completo y él hizo lo mismo, tocó todo a su paso porque sería un desperdicio no hacerlo.

🤍

La luz entró por la ventana. Pero fue el ruido de la puerta abriéndose lo que le hizo despertar.

—Buenos días —le dijo Jungkook con una sonrisa. Traía una bandeja con comida.

Se sentó en la cama y recibió lo que le ofrecía.

—¿Saliste temprano a conseguir esto? —su novio negó y tomó un trozo de fruta.

—Le pedí a los dueños del lugar que nos dejaran el desayuno. Te lo conté cuando veníamos para acá.

—Sí, lo siento. Estaba tan emocionado que no presté atención a eso.

Jungkook se acostó de nuevo a su lado y entre los dos terminaron la comida.
Después, vieron una película. O eso intentó por lo menos él porque Jungkook no dejaba de tocarlo por todas partes.

 —Quiero enseñarte algo —Jungkook tomó su mano y lo guio a la parte trasera del la cabaña. Hoseok se sorprendió al ver a un hermoso perro labrador correr hacia él. Era Chock. 

El perrito lo reconoció de inmediato y comenzó a lamerlo por todas partes.

—¿Qué está haciendo aquí? 

Jungkook se agachó para poder tomar la correa y detener un poco a Chock que empujaba a Hoseok por la emoción.

—El dueño de Chock era alguien mayor y desafortunadamente falleció hace unos días, se estaba quedando en el condominio solo, así que lo traje con nosotros, ¿no te molesta, verdad? —Hoseok negó de inmediato. Se sentó en el suelo y el perro se acomodó a su lado.

Jungkook imitó su acción y ambos comenzaron a acariciar a Chock. Cerró los ojos un momento y se concentró. Era extraño a veces, antes no podía ver lo que ocurría a su alrededor, pero si lo pensaba un poco, en ocasiones, concentrarse en el sentimiento que le transmitía su entorno, era mucho mejor. La energía que le transmitían no podía verla, pero sí sentirla. 

Junto a Jungkook era así. Desde un principio le enseñó que podía confiar en él y con sus acciones le demostró que en verdad lo apreciaba. Lo que le hacía sentir era tan sincero que Jungkook logró convencerlo incluso sin él poder saber cómo era la persona que estaba a su lado.

Jungkook le tomó de la mano levemente y lo ayudó a acariciar la suave pancita de Chock. Algunas veces, Jungkook seguía pidiéndole que cerrara los ojos y se dejara llevar. Sabía que lo hacía porque en ocasiones, el no ver lo ayudaba a no sentirse tan nervioso. Su sonrisa en los labios apareció.

La voz de Jungkook lo envolvía por completo y lo ayudaba a ver sin poder hacerlo. En momentos así no podía dejar de agradecerle a la vida por haberle dado una segunda oportunidad para vivir.

Era querido y amado por los demás, ahora podía sentirse más seguro al estar con otras personas.

Estaba tan agradecido porque por primera vez en toda su vida, se sintió feliz.

🤍

A sido un tiempo para mí.  Pero mi corazón está mejor.

Habrá una nueva historia en unos días, quería publicarla después de este final pero siento que ya era demasiada espera.

El capítulo extra lo publicaré un tiempo después. Gracias por la espera.