Compañeros de asiento

Capítulo 19

Los profesores a cargo de los alumnos de último año se subieron al escenario del fondo donde cada uno de ellos tenía un micrófono para hablar.

Kun y Sicheng estaban a un lado charlando de algo que tenía al profesor malhumorado mirándolos de vez en cuando.

Renjun le dio un suave golpe en el estómago a Jeno para que ambos miraran al profesor.

—Buenas... —Ten miró su reloj—, buenas tardes a todos los alumnos de último año. Decidimos, más bien, el director decidió que se haría de manera diferente la celebración de este día para hacerlo más interactivo.

Algunos alumnos gritaron emocionados, haciendo reír a los profesores.

—Sé que ya quieren comenzar a repartir chocolates y conversar con las personas, pero deben esperar.

El profesor Johnny miró a Ten y este asintió, dándole la palabra. —Esta celebración durará todo el resto de la semana a la misma hora y el viernes por la noche se hará un baile. El director Lee tuvo la idea de imitar una película americana.

Cuando terminaron de dar los anuncios, Doyoung fue el primero en bajar y sin dirigirle la mirada a Sicheng se puso al otro lado del gimnasio con los brazos cruzados.

—¿Por qué siempre tiene que tener cara de perro enojado? —preguntó Chenle a sus amigos—. Les juro que es una tortura tenerlo de profesor a cargo.

Mark le acarició la cabeza. —Lamento que lo tengas a él y no al profesor Johnny. Lo pasarías mejor —el peli celeste sonrió hacia Renjun y este asintió—. Mi amigo Junnie, tú te estás perdiendo de la diversión con la gente culta.

Renjun se rio negando. —No me digas nada que ya me estoy arrepintiendo de haber estudiado con Yangyang.

El peliblanco lo empujó suavemente y Renjun le sonrió. —No es gracioso, te hubieras perdido mi rostro la mayor parte del tiempo.

—¿Premio o castigo? —ambos comenzaron a pelear mientras que los demás los dejaron solo.

—Jeno, ¿ya conseguiste tu caja para los chocolates? —preguntó Taro, abrazándolo por los hombros.

El rubio negó. —¿Debería? No creo que este año reciba demasiados... —antes de terminar de hablar un grupo de chicas se puso frente a él para entregarle los bombones. Jeno asintió hacia ellas, recibiéndolos educadamente—. Gracias.

—¡Lee Jeno ha sido el primero en recibir una tonelada de chocolates! —anunció el profesor Ten apuntando al rubio que no quería atención.

Más chicas se pusieron para entregarle chocolates y este no sabía dónde poner tantos dulces.

Renjun y Mark fueron a buscar una caja grande para que su amigo pusiera todo.

Pasaron 30 minutos cuando la fila dejó de llenarse y los demás recibieron sus chocolates. Renjun agradeció a todos sus amigos por sus regalos y Jeno sacó el suyo.

Es ahora o nunca, Jeno

—Junnie... —Soobin se acercó a su amigo antes de poder llamarlo y le entregó una caja de chocolates con un peluche de zorro.

—Estos no son chocolates de la amistad como los que te dan tus amigos, Junnie —Renjun levantó una ceja y le sonrió.

Chenle le dio un golpe a Jeno para que dejara de mirarlos. —Dáselos ahora o muere en el intento, pero no te quedes mirándolos como si ya se fueran a casar.

—Es cierto, tú puedes amigo —le dijo Haechan dándole coraje—. No te preocupes, hazlo.

Los demás, menos Yangyang lo arrastraron hacia Renjun quien al notarlos se volteó. —¿Qué hacen?