🔸Berlicia-Pasado🔸

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Meses atrás

Alicia Sierra estudiante prodigio de la academia de policías en Francia estaba a punto de culminar sus estudios, se destacaba por tener asombrosas maneras de resolver casos y nunca perder la compostura, estaba en su apartamento cuando el timbre sonó, ya era tarde así que se extrañó un poco, al abrir la puerta se encontró con una mujer.

-Inspectora Montes-se corrió a un lado para que la mujer pasara.

-Te acabas de graduar con honores, te necesito mañana a primera hora en la comisaría, vamos a a atrapar a uno de los grandes y necesito que me demuestres que no eres solo una cara bonita.

-Ahí estaré, pero te recuerdo que me gradué hace cuatro años-la mujer la miró de arriba a abajo y se dirigió a la puerta, cuando estaba de espaldas Alicia habló-Te cuesta mucho decir un "¿felicidades hija?", no importa que lo digas unos cuantos años más tarde-La mujer se volteó y la miró a los ojos.

-Felicidades Alicia, ahora descansa que nos espera mucho trabajo.

La relación entre Alicia y su madre nunca fue tan afectiva, no recordaba la última vez que salieron por un helado o de compras, su madre era una de las inspectoras más importantes de Francia, Rebeca Montes se caracterizaba por ser una mujer de pocas palabras y excelente en su trabajado, cualquier comisaría mataría por tenerla en su equipo y ahora que su única hija se había graduado, estaban en bocas de todos.

Se levantó a las 6:00am se duchó, bebió un café y salió, estaba nerviosa y no por el trabajo que le esperaba sino por tener que compartir tanto tiempo al lado de Rebeca, llevaba trabajando en una de las sucursales de la misma comisaría pero esta vez debía ir a la principal,q tomó aire y entró, la mayor estaba en el fondo hablando con sus compañeros cuando notó la presencia de la mujer. Se paró frente a ella y la miró a los ojos, Alicia no mostró en lo mínimo lo intimidaba que estaba, Rebeca miró el reloj de su muñeca-7:03, a la oficina ya-la siguió junto con otros compañeros , Rebeca pegó unas cuántas fotos en la pizarra y volteó.

-No sabemos que van a robar esta vez, pero lo que sí sabemos es que se están moviendo, hay una exposición de joyas en dos semanas, valoradas en más de 70 millones de euros, es un punto clave, estos cabrones saben muy bien que vamos a estar en el evento, pero corremos el riesgo de estar pensando que vamos a ir a este evento y así aprovechen para robar otro lugar, lo mejor sería intentar entrar a la banda, hacerse pasar por uno de ellos, no nos engañemos, eso no sucederá la otra opción es ganarse la confianza de alguno, ahí es donde entra la inspectora Sierra,  un rostro poco conocido para ellos.

-¿Quiénes son ellos?

-El líder se llama Andrés de Fonollosa-hizo señales para que uno de los compañeros le pasara una carpeta con fotos-es un maldito narcisista que ha robado con éxito en más de 4 ocasiones, sabemos que no está solo, tiene a un grupo de gente a su lado, estamos hablando de informáticos, delincuentes vamos la combi completa.

-Y ¿qué te hace pensar que ese tipo confiaría en mí?

-Ese tipo confía en toda mujer, lo que más ama después de las joyas es a la mujeres.

-¿Entonces me vas a usar de puta?-Sonrío.

-Por favor inspectora, un poco de seriedad ante el caso, si piensa que no puede cumplir, detrás suyo está la puerta.-Alicia la miró a los ojos y suspiro cruzando la pierna y apoyando sus brazos en la mesa.

-¿Cuál es el plan?

Pasaron 4 días, Andrés era un hombre que le gustaba salir a tomar café por la calles de Madrid y pasearse frente a los policías que aunque sabían que era un completo criminal nunca lo atrapaban con las manos en la masa. Esa mañana entró a la elegante cafetería que solía ir y como siempre se sentó en una de las mesas cerca de la ventana, llegó la mesera.

One shots-Njw.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora