| Harry Potter | El Legado del Inefable

Capítulo 6- El Juego de las Sombras

—Creaste aquello que podía matarte, Voldemort.

Es importante mencionar que todos los derechos de autor de Harry Potter pertenecen a su autora, J.K. Rowling. Este fanfic es simplemente una adaptación de su historia y no pretende ser otra cosa.

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—Hm~, entonces... Quiero que me des información de todo lo que sucede en la Sala Común de Slytherin, ¿bien?

"Entendido, maestro. Vigilaremos a los estudiantes y, si se atreven a atacar a su protegida, tomaremos medidas drásticas."

Los siseos en la habitación bañada de verde y plateado de Harry provenían de las estatuas con forma de serpiente en su alcoba.

Aquellas estatuas habían sido colocadas como medida de protección para los estudiantes de Serpiente por el mismísimo Salazar Slytherin, pero al sentir la llegada de su maestro, finalmente despertaron de su letargo.

Actualmente, la mazmorra de Slytherin estaba bajo el completo control de Harry Potter.

Incluso la mismísima puerta de Slytherin se abriría ante su maestro.

Una de las cualidades que adquirió cuando Severus Snape los llevó a la Sala Común. Al estar parado en medio, ni siquiera hizo falta la contraseña secreta. Simplemente, con la llegada del maestro de las serpientes, la puerta se abrió instantáneamente.

Sin embargo, la mañana del día siguiente fue completamente caótica. Algunos estudiantes de Slytherin sufrieron parálisis durante la noche al intentar entrar al cuarto de chicas, y otros al intentar entrar al cuarto de Harry Potter.

Una cosa que no pasó desapercibida ante la mirada del líder de las serpientes, Severus Snape, quien quitó varios puntos a su propia casa.

Pero ahora se encontraba de camino a su última clase del día, Pociones con Severus Snape. Harry había sido informado de la cercanía de Snape con su madre y padre, así que debía tener cuidado.

Que fuera una serpiente no significaría que Harry sería liberado de la arrogancia de su padre, pero debía demostrar lo contrario. Severus Snape sería un muy buen activo como informante para Harry y no dudaría en tirar de ese hilo, por muy corto que fuera.

—Oi del ataque en la mañana, Harry. ¿Te encuentras bien? —Preguntó Cassiopeia, quien mantenía sus libros abrazados y con su mirada enfrente.

—¿Preocupada por mí, Cass?

—¿Por qué? ¿Qué harías con la respuesta? —Sonrió la pequeña serpiente para deleite de Harry.

—Depende, probablemente. Pero estoy bien, me sorprendió el ataque, supongo. Pero lo que más me sorprendió fue la parálisis que sufrieron.

—¿Prefectos, probablemente? —Preguntó Cassiopeia con duda—. Los prefectos de Slytherin son diferentes a los de las demás casas. Actúan con fuerza contra quienes se meten en problemas.

—Interesante. Aunque más temo por el sermón que me dará Pansy y Hermione.

—¿Gustas de alguna de ellas?

—¿Por qué la pregunta?

—Hm... Simplemente una duda, supongo.

Al entrar al salón de clases, caminaron hacia sus respectivos asientos. Cassiopeia se sentó junto a su mejor amiga, Pansy, mientras Harry se sentaba al lado de Hermione.