| Harry Potter | El Legado del Inefable

Capítulo 19- Plan para la Piedra Filosofal

—Creaste aquello que podía matarte, Voldemort.

Es importante mencionar que todos los derechos de autor de Harry Potter pertenecen a su autora, J.K. Rowling. Este fanfic es simplemente una adaptación de su historia y no pretende ser otra cosa.

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El frío que había llegado con el invierno finalmente retrocedió, dando paso a lloviznas que golpeaban Hogwarts y una lluvia primaveral que caía sobre los terrenos. Para muchos, era una buena noticia, una señal de que el verano se acercaba.

Sin embargo, Harry no estaba tan emocionado. El año escolar estaba llegando a su fin y su misión de conseguir la Piedra Filosofal, tal como estaba predicho, se había estancado. Hasta junio tenía para encontrar la maldita piedra, y ya se había perdido de varios avances.

Aunque aún era marzo, tenía cuatro meses para encontrar las pruebas para la piedra. Argus, su padre, ya había conseguido una tapadera para que Annabeth, miembro de su equipo de Inefables en Londres, se infiltrara en Hogwarts como una estudiante de intercambio. Dumbledore no estaba de acuerdo, pero al ser una misión de los Inefables y bajo la estricta orden de Argus, su poder decaía.

—¿Pasa algo, Harry? —preguntó Daphne, agitando su varita.

Harry salió de sus pensamientos cuando Daphne le habló. Miró a su alrededor, intentando recordar dónde estaba, y se dio cuenta de que se encontraba en la Sala Común de Slytherin. Era el día en que Daphne comenzaría el preludio de su entrenamiento.

—Estaba pensando, en realidad —respondió Harry, agitando la mano para indicarle a Daphne que lo siguiera.

Daphne arqueó una ceja mientras Harry la llevaba a los dormitorios de los hombres, exactamente a la ubicación donde él se hospedaba en la Sala Común. Al entrar, todo era completamente diferente a lo que había visto en las habitaciones de las chicas y sus amigas.

El color verde predominaba, como era de esperar, pero era un tono más apagado que el de su habitación. El frío se percibía en el ambiente y el espacio parecía vacío, solo contenía lo necesario. Había un baúl donde Harry guardaba sus pertenencias, un armario y sus libros de estudio, sin olvidar su cama. No había elementos innecesarios.

—Ah... ¿Qué estamos haciendo en tu habitación, Firestick? —preguntó Daphne, frunciendo el ceño mientras su voz adquiría un tono frío.

—No me malinterpretes, Daphne. Este lugar es el único donde podemos entrenar, ya que las barreras mágicas de Hogwarts no llegan hasta las mazmorras y, si lo hicieran, Salazar construyó estas barreras.

—¿Qué significa eso?

—Una barrera tan poderosa como la de Hogwarts requiere sangre. Sangre que comparto con Salazar —respondió Harry, alzando su varita—. Además...

'Indigo invisibilis, protegus magicae,

Aperiens occultus, barrierae invictae.

Abscondo potentia, celo incantatio,

Ab oculis invasor, prohibeo scire.

Nulla detectio, nulla suspicio,

Magiae occulta, imperium silentium.'