25- Pasado y presente

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Cuando Zeke finalizó sus estudios secundarios y dio el examen de ingreso a la universidad, un gran cuestionamiento interno vino a él tras concluir esa primera etapa llamada adolescencia.

Ya no era un niño precisamente, pero tampoco un adulto del todo y solo estaba en sus manos el camino a seguir.

Nunca se interesó en nada que tuviera relación con la política a diferencia de su padre y quizás, influenciado por el recuerdo de esa mujer que fue su madrastra en su niñez se decidió por la arquitectura.

Lo que no sabía Zeke, al ingresar a la facultad de arquitectura es que encontraría a alguien con motivaciones similares a las suyas aunque con otros planes en mente.

Su primer encuentro con Levi, no fue amistoso en lo absoluto y a pesar de sus prejuicios, sumado a la incómoda poca simpatía mutua, algo en aquel sujeto de apariencia malhumorada y cabello negro como el anochecer hizo que Zeke le prestara más atención de forma silenciosa.

Tenía que admitir que Levi era bastante aplicado académicamente y esa sensación inicial de su orgullo herido desapareció sin que él fuera consciente de eso.

De vez en cuando salía con algunas chicas solo por matar el tiempo y era frecuente que entre semana no regresara a casa a dormir.

Las cosas se complicaron más desde que  Zeke descubrió a Yelena, durmiendo con su padre.

Si bien algo de afecto había hacia esa mujer, aquel sentimiento no podía llamarse amor y eso acrecentó aún más el desprecio hacia su padre que tenía cierto talento para destruir todo a su paso con sus malas decisiones.

En los estudios ya no estaba rindiendo frutos y fue más frecuente el sinfín de excusas para saltarse clases y no regresar a casa durante la noche.

Aquel día, Zeke solo buscaba un sitio donde poder sentarse y sobrellevar la resaca luego de una noche de fiesta. Descubrió entonces que el único lugar silencioso de la universidad era la biblioteca.

También descubrió, que aquel lugar era visitado con frecuencia por Levi que disfrutaba el silencio y el aura relajante de su entorno.

Pero también, le recordaba a su niñez.

De vez en cuando, Zeke podía sentir la mirada de ese hombre quemándolo a la distancia.

Zeke estaba seguro de que si tal vez estuviesen solos, ese sujeto saltaría sobre él y rompería su cuello.

Sin embargo, Zeke encontró divertido aquel extraño nuevo pasatiempo consistente en observarse mutuamente sin decirse nada.

Era la primera vez en semanas que Zeke regresaba a una clase junto a los demás, sin embargo algo hizo que su sonrisa burlona desapareciera de su rostro.

—Como lo hablamos la semana pasada, asignaré a cada uno trabajar junto a otro para presentar el proyecto de investigación de final de semestre.

El profesor comenzó a citar nombres de los estudiantes que trabajarían juntos y entonces algo lo dejó frío.

—Levi Ackerman y Zeke Jaeger.

Zeke vio a Levi sobresaltarse, aunque de inmediato guardó la compostura y fingió tomar apuntes mientras su profesor continuaba organizando a los estudiantes.

Pasaron tres días desde entonces y ninguno de los dos pretendía romper la barrera inicial  de la timidez y la ansiedad estaba atormentando a Zeke ante el desinterés de ese hombre en trabajar juntos.

Los secretos del protegido [Zevihan] (Historia completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora