Capítulo 22. Enfrenta tus demonios

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| Regina |

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| Regina |


— ¿Exactamente que festejamos con esta fiesta? — pregunte.

— El cumpleaños de tu novio — contesto Dorcas mientras terminaba de hacerme pequeñas trenzas en el cabello.

— Se que es su cumpleaños, pero no entiendo porque una fiesta, no le agradan demasiado —

— Eso es muy cierto, pero los slytherin querían una excusa para celebrar — sonrió con malicia.

— Dime que no habrá whiskey de fuego — la mire por el espejo.

— Lo dices como si no lo amaras, te recuerdo que bebiste bastante en tu cumpleaños anterior — enrojecí un poco por los vagos recuerdos.

— Eso fue distinto Meadows — ambas comenzamos a reír.

— ¿Tienes el regalo de Regulus? — pregunto — aunque supongo que, si no es algo material, quizá seas tu eh — comenzó a hacer morritos.

— Que tonta, claro que lo tengo — fui a por el — es su libro favorito, la edición original — comenté con una sonrisa.

— ''El retrato de Dorian Grey'' — leyó — suena interesante.

— Fue el libro que leía el cuándo nos conocimos — sonreí con nostalgia, íbamos en el tren rumbo a nuestro primer año en Hogwarts.

— Bueno, bueno. Basta de melancolía, ¡vamos! — y con eso tiro de mi mano para llegar a la sala común.

La música resonaba por toda la sala, había compañeros de mí misma casa, entre otros Ravenclaw y bastantes Hufflepuf y muy pocos Gryffindor. En realidad, todo estaba bastante tranquilo pero animado, los Slytherin sí que sabíamos dar fiestas.

Llegue a una de las mesas donde había ponche para comenzar a servirme un poco, me gustaba como iba vestida hoy; falda negra, botas, una blusa satinada y una chaqueta plateada, llevaba el pelo atado en diversas trenzas que dejaban escapar algunos mechones.

Para cuando bebi de mi ponche descubrí que este ya contenía un leve sabor a whiskey, esto se pondría interesante.

Un bullicio de gente me hizo girarme y saber inmediatamente que Reg ya se encontraba en la fiesta, escuche como había algunas personas felicitándolo y con su elegancia de siempre les agradeció mientras continuaba avanzando. En cierto punto de la fiesta logramos encontrarnos.

— Reg ¡Feliz cumpleaños! sé que ya te lo dije, pero no importa — esa mañana ya lo había felicitado en el desayuno.

— Gracias corazón — nos dimos un pequeño abrazo amoroso.

— ¿Listo para festejar? — pregunte animadamente.

— Sabes que preferiría solo estar contigo, esto no era necesario — esbozo.

Cuestion de tiempo // Regulus BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora