19

2.8K 251 7
                                    

› Lisa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lisa.

Debía hacer algo, no quería que Jennie se lastimara por la mala broma de Miyeon, cuando sonó el timbre para irnos supe que ya tenía que actuar, agarré mi mochila y corrí a la ultima clase que le tocó a Jennie, arte.

Corrí lo más rápido que pude, logré visualizar a Jennie saliendo del salón de arte con una cara hecha furia, me asusté demasiado, parecía un gato salvaje sin sus vacunas, corrí aún más rápido.

— Ni lo intentes Lalisa — ella me miro e iba a correr a la salida pero yo la abracé metiéndola de nuevo al salón — ¡Lisa! — me gritó cuando la solté y cerré la puerta.

— Jennie no quiero que algo malo te pase en una tonta pelea — la miré cruzándome de brazos.

— Ella te besó, ¡Solo yo puedo besarte! — sentí que un bombillo en mi cabeza se había encendido.

— Entonces, en vez de ir a malgastar tu tiempo en ella ¿Por qué no aprovechamos ese tiempo en otra cosa? — le pregunte quitándome mi chaqueta y dejándola aún encima de uno de los pupitres.

Me iba acercando a Jennie mientras ella iba retrocediendo pero no pudo retroceder más ya que chocó con la mesa de la maestra.

— Lisa... — un suspiro salio de sus tan bellos labios al sentir mis labios en su cuello — B-Basta... Debo ir... Al... Al... — ella trataba de hablar pero yo seguía besando apasionadamente su cuello dejando una que otra marca.

Abrazando su cintura la senté en la mesa aún besando y lamiendo su cuello, sus manos fueron a mis hombros, quería alejarme pero no lo iba a lograr.

— ¿Quieres que me detenga? — susurre en su oído subiendo su blusa, ella negó con la cabeza, con sus manos agarró mi rostro y junto nuestros labios en un necesitado beso.

Lamentablemente el momento fue arruinado, alguien abrió la puerta.

— Señoritas, no creo que estos sean lugares para esta clase de acciones — las dos asentimos avergonzadas, agarré mi chaqueta, Jennie y yo salimos del salón y después de la secundaria.

— ¿Me prometes no meterte con Miyeon? — la miré mientras agarraba su mano.

— Lo prometo — respondió, aunque su sonrisa malvada me daba mala espina, no le hice caso y le sonreí.

— Lo prometo — respondió, aunque su sonrisa malvada me daba mala espina, no le hice caso y le sonreí

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Irene.

— ¡Por Jennie! — todas gritamos al unisono antes de tirarle los sacos llenos de basura al auto de Miyeon.

— Somos las mejores amigas — dijo Rosé sacudiendo sus manos, Momo y yo asentimos.

— Brutas ¡La policía! — Momo nos gritó pero ya Rosé y yo ya estábamos lejos corriendo.

Nos metimos por un callejón pero al llegar al final solo había un muro.

— Buena suerte Irene — dijo Rosé mientras escalaba el muro, ¿Cómo mierda? — Mi tía es mexicana ― ya todo tiene sentido, Rosé estiro su mano, yo salté y la agarré logrando escalar el muro, espero Momo este bien.

Jennie.

Lisa me había acompañado a mi casa, yo quería que ella se quedara ya que mi mamá no estaba, luego de haberle dado muchos besos en su ahora roja cara acepto.

— ¿Quieres ver una película? — le pregunté mientras ella se sentaba en el sofá.

— Claro, me encantaría — me sonrió ampliamente dejando mostrar sus lindos dientes.

— Bien pero en mi habitación — le sonreí pícaramente logrando que se sonrojara — Haré palomitas — ella asintió mientras se iba a mi habitación, caminé a la cocina y preparé las palomitas.

Luego de que ya estén listas las eche en un recipiente y camine a mi habitación dónde se encontraba una "dormida" Lisa sobre mi cama, coloqué el recipiente en mi mesa de estudio y me subí en mi cama colocándome sobre ella.

— Lisa... — susurré en su oreja rozando mis mojados labios en este — Lisa- ah~... Sigo caliente... — reí suavemente al sentir sus manos mi cintura.

— ¿Y qué quieres que haga? — me preguntó abriendo sus ojos y bajando sus manos a mi trasero para empezar a apretarlo sacándome pequeños gemidos.

— Aah... Hágame suya una vez más... Papi... — gemí en su oído.

 — gemí en su oído

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sueños húmedos con la nerd | 𝗝𝗟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora