Suspiros infinitos

Capítulo 9: Lucas

Me había parecido buena idea ir al centro comercial. Aparte, tenía que comprarme algo para la fiesta de Dylan. No tenía traje de chaqueta.
También venían Kim y su amiga Lía, así que nos lo pasaríamos bien. Mientras me vestía, me llegó una llamada de Ben, uno de mis amigos. Se lleva algo mal con Jackson.

-Ey tío ¿qué haces hoy?- me preguntó.
-Estoy preparándome para irme al centro comercial con Jackson ¿y tú qué?-
-Cualquiera diría que sois novios. Os lleváis todo el día juntos.-
-También va su hermana y una amiga suya.-
-¿Kimberly? ¿Qué haces juntándote con esa niña?-

Entorné los ojos. Ben era el típico que solo pensaba en si mismo y en lo que pudieran decir los demás de él. La rivalidad entre Jackson y él se debe a que Ben estaba de titular en un partido, pero entrenando se partió el ligamento de la rodilla y su sustituto fue Jackson. A Ben no volvieron a ponerle de titular.

-Bueno, a lo que iba.- comenzó a decir. - Freya me ha pedido que vaya con ella al baile.-
-¿Y por qué me lo dices como si fuese a matarte? Me da igual Freya.-
-Me ha hablado de ti, está algo tocada.-
-¿Me has llamado para decirme eso?-

Se queda en silencio. Estaba claro que Freya solo quería ir al baile con Ben para ponerme celoso. No lo conseguía, pasaba de ella. No tenía el más mínimo interés en ella. Se escuchó de repente una voz de una chica. Era ella. Estaba con Freya.

-¿Con quién vas a ir tú a la fiesta?-

Era obvio que Freya le había obligado a preguntarme eso. Pero, para que se callara la boca, para que no se pensara que no iba con nadie porque la echaba de menos, que no era el caso, pero sacaría sus propias conclusiones y sería aún más pesada, le dije con quién iba a ir a la fiesta , quién iba a ser mi pareja.

-Voy con Kim.-

La acababa de liar. Jackson me iba a matar en cuanto se enterase. Pero no podía hacer nada, ya estaba hecho.
Ben se había quedado en silencio de nuevo. Me quedé esperando una respuesta.

-¿Sigues ahí?- pregunté mientras me ponía los zapatos.
-¡Lucas Taylor!- gritó Freya de repente haciendo que casi se me cayera el móvil. -¿Cómo puedes hacerme esto?-
-Pero ¿A ti qué te he hecho yo ahora?-
-No me vengas con tonterías ¿en serio me has cambiado por esa plebeya? No me esperaba que fueras a caer tan bajo.-
-Yo tampoco me lo esperaba de ti. Escuchando conversaciones ajenas Freya Smith.-
-¿Te crees muy gracioso? No te hará tanta gracia en la fiesta cariño.-

Después de eso me colgó. No me preocupaba en absoluto. Me fui tan tranquilo hacía el coche de Jackson y fuimos a recoger a Lia. Estaba algo tenso porque tendría que pedirle a Kim ir a la fiesta con ella. Y no es que no pudiera, pero me daba cosa hacerlo por presión social.
Cuando me recogieron en coche, me sentí peor aún, así que esperé a que ella subiera a casa de Lía para que yo pudiera hablar con Jackson.

-¿Crees que tu hermana aceptaría ir a la fiesta conmigo?- pregunté sin previo aviso.
-¿A qué viene esa pregunta?-
-Te voy a ser sincero. Le he dicho a Ben que iría con ella.-
-¿Con mi hermana? ¿Por qué?-
-No paraba de meterme presión. Pero es que fue la primera que se me vino a la cabeza.-

Sentía cómo le disgustaba tanto esa idea. No soportaba a Ben, y encima yo estaba metiendo a su hermana en esa movida en la que me había metido él.

-Sabes que no me gusta la idea. A saber lo que se le ocurre a Ben, y más sabiendo que vas a ir con mi hermana.- continuó.
-Sólo será la fiesta, te lo prometo.-
-Vale, me lo estás prometiendo, no falles eh.-

No le fallaría. Sería sólo la fiesta.

-Bueno, primero a ver si acepta venir conmigo.- dije
-Créeme, lo hará.-

Me extrañó esa respuesta, pero terminé ignorándolo porque sacó un cigarrillo, y eso se merecía toda mi atención.
Cuando Lía y Kim salieron y venían hacia nosotros, empecé a ponerme nervioso, no sabía cómo hacerlo. No sabía cómo pedirle que fuese conmigo a la fiesta, pero lo haría cuando estuviéramos solos los dos. Aunque con Jackson rondando, dudo que fuese a ser posible.
Empecé a picarla un poco para que se relajase el ambiente, pero sentía como a mi amigo no le gustaba nada.
Al llegar al centro comercial, las chicas fueron a su bola entrando de tienda en tienda. Al entrar en una, salían con una bolsa, y su contenido no tenía nada que ver con la fiesta.
Jackson se fue a la cafetería mientras yo seguía buscando el traje para la maldita fiesta. La sección donde yo estaba buscando estaba justo en la entrada del probador. Sentí la presencia de alguien detrás de mi, así que me giré. Era Kim, y llevaba puesto un vestido rojo corto pegado, con brillos. Era de tirantes y con la espalda completamente descubierta.
Abrí un poco los ojos, no me la esperaba así.

-¿Has visto a Lia?- preguntó ella.
-Creo que ha ido a los probadores también.-

Resopló. La verdad es que ese vestido le quedaba súper bien.

-¿Te vas a poner eso para la fiesta?-
-No estoy segura.-

Esbocé una sonrisa. Tenía que ir así vestida.

-Deberías llevártelo, te queda muy bien.-
-¿De veras?-
-Te lo prometo. Cómpratelo.-

Le salió una sonrisa adorable, acto seguido volvió a entrar en su probador. A los dos minutos salió ya con la ropa que traía puesta.

-Bueno ¿y tú qué? ¿Has encontrado algo?- preguntó ella.
-Voy perdido. Buscar trajes no es lo mío, nunca pensé que llegaría a hacerlo.-
-A ver, tampoco será tan difícil. Yo te ayudo anda.-

Cuando me di cuenta, estaba en medio del pasillo de los probadores desfilando con un traje de chaqueta azul marino. Era el único que me había gustado. Esbocé una sonrisa, la verdad es que me veía bastante guapo.

-¿Cómo lo ves?- pregunté.
-Estás muy guapo, te queda genial.- contestó ella.

Eso hizo que me sonrojase un poco, he de admitirlo. Yo le respondí con un simple "gracias" y salimos de los probadores para pagarlo. En ese momento llegaron Lía y Jackson con un montón de bolsas.
Kim no paraba de mirar un collar, el cual era muy bonito. Era una cadena dorada con una piedra violeta en el centro. Ahí me vino la idea perfecta para que aceptase venir conmigo al baile.

-¿Te gusta el collar?- pregunté.
-Si, es precioso.-

Le sonreí y ella me miró extrañada.

-Mira, te propongo una cosa.-
-Sorpréndeme.-
-Si te compro ese collar vendrás conmigo a la fiesta.-

Abrió los ojos como platos. He de reconocer que debería haber sido menos directo, pero no se me ocurrió otra manera de decirlo y era el momento perfecto.

-¿Me lo estás pidiendo a mí?- dijo al fin.
-Claro ¿a quien si no?-

Soltó una risa.

-Mi hermano nos va a matar.-
-¿Nos?- añadí.
-Claro. Acepto ir contigo a la fiesta Lucas Taylor.-

Después de eso, sentía como su hermano nos miraba seriamente, y sobre todo a mí. Por favor, quiero que esa maldita fiesta pase ya.