Oficina

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Advertencia de actos sexuales explícitos

Trabajar con Tenoch es una de las cosas más agradables que hay, pero puede llegar a ser muy exigente con su trabajo, así que a veces puede llegar a ser pesado, y así podría definir mis últimos meses de trabajo con el.

Tenoch preparaba una campaña sobre la concientización de racismo, ya que es un tema que el habla mucho, además de que ahí podría presentar oficialmente su nuevo libro "Orgullo prieto". Yo ayudaba a Tenoch en preparar un discurso para la campaña.

Después de trabajar meses y meses, ya estábamos en lo final, solo faltarían algunos detalles sobre el discurso y podríamos concluir todo. Durante este tiempo trabajando juntos nos dimos cuenta que somos similares, y muchos de nuestros gustos se asimilan, así bedido a eso se había creado cierta conexión entre nosotros.

Durante el tiempo trabajado, salíamos a cenar o incluso cenabamos en nuestras casa, claramente con charlas divertidas e interminables. Estar con el era como desaparecer del mundo y estar en otro lugar donde solo existiamos el y yo, podría decir que un sentimiento de amor crecía en mi pecho cada día más.

-¿Y que te parece si le agregamos esto?- Dijo, mostrándome la pantalla de aquella laptop, donde se encontraba el borrador del discurso.

-Me parece bien, pero mejor ponlo así.- Dije tomando el aparato y modificando algunas de las frases; cuando termine le mostré el resultado.

-No se que haría sin ti.- Dijo, mientras me miraba con una sonrisa bastante encantadora a mi parecer.

-Ya me cansé.- Dije estirandome en la silla, para luego recargar mi cabeza en el hombro del moreno.

-Ya casi son las 9.- Dijo mirando su reloj.

-¿Lo ves? me estás explotando laboralmente, talvez te demandé.- Dije con un tono exagerado; el solo río ante mi broma y paso su brazo al rededor de mis hombros.

-Y si te invito a cenar en mi casa ¿retirarias la demanda?- Su sonrisa permanecía, y empezó a acariciar mi cabello con una de sus manos.

-Depende que sea la cena.- Lo mire.

-Lo que tú quieras, pequeña.- Solo podía sonreir como una tonta ante tal apodo que me había puesto.

La luz de la luna entraba por el estudio, iluminando nuestros rostros y sin duda el se veía totalmente bien. Este era uno de nuestros momentos más magicos y que recordaría durante mucho tiempo; los dos nos miramos a los ojos, sonrientes, dejo acariciar mi cabello y puso una mano en mi cintura y la otra la poso en mi mejilla.

-¿No te das cuenta?- Dijo, mientras su mirada analizaba cada parte de mi rostro.

-¿De qué?- Pregunte con cinismo, al tener una idea de lo que vendría después.

-De esto.- Acerco sus labios a los míos y empezo a besarlos con desespero; por mi parte trataba de seguir su ritmo.

Así siguió el beso durante unos segundos más, cuando nos separamos nos miramos y decidí subir encima de sus piernas, volviendo a retomar el beso. El moreno tomaba mi cintura y la acariciaba por debajo de mi blusa

-¿Puedo?- Dijo refiriéndose a si podría quitar mi blusa.

Asentí con la cabeza y el procedió a desprender la prenda de mi; empezó a dejar besos húmedos por todo mi cuello mientras bajaba hasta llegar a mis pechos, los cuales empezó a tocar y chuparlos a su gusto. Comencé a mover mis caderas sobre su miembro, empezando a notar que este comenzaba a crecer por el continúo roce.

No tardó en volver a atacar mi boca con un beso. Dirigí mi mano hacía su miembro acariciandolo sobre el pantalón.

-Sacalo. -Dijo Tenoch con una voz firme.

Yo acate su petición, y saque su miembro ahora totalmente duro; realmente era más grande y gruesa de lo que pensaba. Empecé a subir y bajar mi mano por todo el falo; en la cara de Tenoch se podía ver qué comenzaba a disfrutar del tacto.

-Hazlo más rápido, linda.- Dijo soltando un jadeo.

Comencé a subir la rapidez de mi mano, pero ¿qué tal si lo hacemos más divertido?. Baje de sus piernas y comencé a dar lamidas a todo su miembro, también haciendo círculos en la punta de su verga; que esto último parecía gustarle bastante. El moreno echaba su cabeza hacia atrás dejándola caer debido a la excitación que este tenía.

Así pasaron varios minutos, disfrutando de chupar todo eso que había deseado desde hace tiempo, sintiendo cada parte de su verga caliente en mi boca, además de disfrutar de los jadeos y suspiros que soltaba; ver a un Tenoch así de caliente era una verdadera obra de arte y esto talvez podría llegar a más que solo una mamada.

-M-me voy a venir, princesa.- Dijo entre suspiros.

-Entonces, dame de tu leche papi.- Dije descaradamente, para después seguir haciendo las acciones que lo mantenían en ese estado.

Después de unos pocos segundos el se corrió en mi boca, trague su semen y me senté nuevamente en sus piernas.

-Me pones tan caliente, linda.- Tomo mi mejilla con una mano y empezó a besarme; con su mano libre me tomo de la cintura acercando y restregando más nuestros cuerpos.

859 palabras 🤠

¿Cómo andan chicuelos?, bueno como dije en el aviso pues voy a estar más activa por acá, realmente tengo bastante ideas sin terminar y durante esta semana espero terminar varias, en fin, besos en la cola. 💋💋

¿cuál es su palabra favorita? 🤓

•One shots of Tenoch Huerta •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora