23. Innecesariamente Cruel

84 11 6
                                    

*imagina que te salude como coreana que hace asmr de comida*

.

.

.

Capítulo Veintidos
"Innecesariamente cruel"

.

.

.

Ella le miraba inquisitiva; había descubierto su plan y sabía -porque la conocía- que en cualquier momento podía golpearlo.

-¿Qué haces aquí?-de nuevo le habló y su ceño fruncido le estrujó el corazón -Sabía que eras tu quien dejaba esto...-Hablo entre dientes, mas para ella que para él.

Sus dedos señalaron las bolsas y su mirada se posó sobre Sonic quien seguía en silencio sin saber como responder.

Todo se congeló...

Quiso hablar, moverse antes de que ella actuara primero y le cerrara la puerta a la cara, pero no paso.

Solo se quedó ahí parado como un idiota adolescente y la garganta se le cerró.

Supo que había pasado mucho tiempo cuando ella hablo de nuevo y se hizo a un lado tomando las bolsas.

-Entra, no me quiero arrepentir-Fueron sus palabras y se perdió dentro de la casa para su sorpresa y estupor.

Mecanicamente entró detrás de ella y cerró la puerta con cuidado.

No se atrevió a moverse de ahí, así que solo espero.

Era la segunda vez que entraba en su hogar y se sentía incluso más calido que la primera vez.

Olía a manzana y canela...

No supo si era su aromatizante o si de verdad ella olía así, pero fue agradable la sensación que le generó.

-Ven-La vio desde la cocina hacerle señas y torpemente se acercó hasta ella.

No quería tentar a la suerte, si era un sueño no quería despertar. Fuese lo que fuese quería ser cuidadoso.

Ella estaba sentada en la mesa con las bolsas encima de esta y dos tazas reposando una frente a la otra.

Entonces pudo interpretar que eso era una invitación a sentarse y pese a dudarlo lo hizo lentamente.

El humo de la taza le llegó de nuevo y le dio un ligero escalofrío.

Iba a hablar, de verdad quería hacerlo, pero las palabras no salieron de su boca.

No obstante ella se le adelantó.

-¿Por qué haces esto?-Fue directa y sin rodeos, no necesitaba perder mas el tiempo-¿Qué pretendes?-.

Tuvo que tomar aire para atreverse a responder.

-Quiero ayudarte-.

Así de simple era la cosa, incluso se sorprendió a si mismo por su simplicidad.

Evidentemente no esperaba esa respuesta, o quizá si y es justamente por eso que se veía así de molesta.

-No pedí tu ayuda-.

-Lo sé...-

Contestaba por instinto, aunque en el fondo si lo pensaba.

Sabía que ella no pediría nada de él, ya se lo había dejado muy en claro cuando firmaron el divorcio y las últimas palabras que se dedicaron durante su último encuentro.

Aún con esto y pese a lo mucho que le estaba doliendo su indiferencia no se iba a rendir.

La amaba demasiado, aunque no se lo iba a decir directamente, no iba a creerle.

Aʟɢᴜ́ɴ Tɪᴘᴏ ᴅᴇ IɴᴅᴜʟɢᴇɴᴄɪᴀDonde viven las historias. Descúbrelo ahora