El bicolor se preparaba para salir mientras guardaba sus cuadernos en su mochila, adormilado sintió que su celular vibraba de manera anormal.
Al sacarlo de su bolsillo trasero pudo ver que la razón por la cual su celular estaba apunto de explotar era por su linda amada Hanako.
‐ choto
-choyo
-choto
-mi amor
- urgencia plis contestA
-Hanako, ¿qué pasa?
-
-necesito que cuides a suga, llegó un gran pedido a la florería y debo ayudar a jefe.
- porfis, te lo compesare 🙏
- bien, ten cuidado.
S
onrió levemente mientras guardaba su celular en su bolsillo otra vez y se acomodaba la mochila. A paso moderado se cambió los zapatos, dándole a Midoriya una leve despedida.
En 10 minutos ya había llegado al departamento de Hanako, buscando debajo de la alfombra encontré una copia de las llaves. Abrió la puerta y lo primero que vio fue a Suga dándole la bienvenida con un maullido.
— Hola, Suga. — acarició levemente su cabeza mientras se quitaba sus zapatos — Hanako vendrá tarde hoy, así que estaré a tu cuidado.
— Miau.
Se dirigió a la cocina buscando en la alacena los sobres de comida para gato, una vez abierto y servido en el plato color gris dejo la basura en la bolsa y se lavo las manos.
Saco de su bolsillo su celular le tomo una foto a Suga comiendo para mandárselo a su amada que respondió con una foto de ella sonriendo y de fondo un montón de flores de diferentes color y formas.
— Linda...
Agarró su mochila sacando sus cuadernos para hacer sus deberes, de vez en cuando Suga se sentaba alado de él mirándolo con curiosidad para que al final se fuera a jugar con su rascador.
Shoto no se dio cuenta del tiempo que había pasado hasta que sintió que una reconocida voz gritaba "estoy en casa", con rapidez se levantó y fue a abrazar a la pelicafe dándole un beso.
— Hola, amor mio~ — agarró las mejillas del bicolor dándole muchos besicos por todo su rostro —. Traje un montón de onigiris para comer, deja me lavo las manos y comemos, ¿vale?
— Esta bien.
La pelicafe dejó la comida en la encimera de la cocina y se dirigió al baño para lavarse sus manos. Mientras que el bicolor sacaba dos vasos con agua.
— Muy bien, Shoto. — Hanako se paro a su lado abrazándolo por la espalda — ¿Cómo te fue?¿Hubo chisme hoy?
— Lo normal, entrene con Midoriya y Iida.
— Muy bien, él pedido que dejaron en la florería era gigante, terminé con muchas espinas en mis manos pero el nuevo me ayudo a sacarlas — mostró su manos con un montón de banditas pegadas —.
— Ten más cuidado. — tomo su mano con delicadeza para darle un beso — No queremos que estas lindas manos se desperdicien, ¿verdad?
— Oh. Eres lindo, muy, muy, muy lindo. Podría morir...— Hanako expresó con las orejas rojas — Vamos a comer, que no quiero que se enfríe.
La comida prosiguió con tranquilidad y una que otra broma por parte de la pelicafe que no podía evitarlo mientras que el bicolor algunas veces se lo regresaba tomándola con sorpresa.
