¿Qué quieres de mi?

Empezar de cero

Sam
Desperté y Lina no estaba. Me había dejado solo en mi casa. No entendí porque se marchó de esa manera.
La llamé decenas de veces y no me respondió. Por último apagó su teléfono.
- ¡Me vas a volver loco! Hay mujer mira que eres obstinada.
No podía dejarme así, me vestí y fui a buscarla.

-¿Estás bien?
- Si mamá, lo estoy.
- Sam ¿estás viendo a alguien?
-¿A que viene eso?
- En que no se nada de tu vida hijo y después de tu divorcio no hemos podido sentarnos a platicar como se debe. Además, Elsa me comentó que encontró una chica en tu departamento.¿Es cierto?
Nunca me ha gustado hablar de esos temas con mi mamá, se que ella no me va a juzgar, pero nunca sé como va a tomar lo que digo.
- Hay alguien, es una compañera de trabajo, más bien es una adjunta a mi.
Es una mujer preciosa, talentosa y con un corazón enorme. No tenemos una relación declarada pero llevamos 2 meses viéndonos. La verdad, me trae loco.
-¿y por qué no la conozco?
- Lina es una estudiante de último año y yo soy su tutor. Las cosas se fueron dando sin planear nada y no quiero que haya malos entendidos en el hospital, asique tratamos de mantener un perfil bajo. Estoy esperando a que culmine sus exámenes para proponerle que sea mi novia.
- ¿Te gusta?
- Pero ¿y este interrogatorio?¿Acaso no estoy aquí por que te sientes muy mal?
- Si hijo, pero quiero aprovechar para saber de tu vida. No me has contestado.
- Me encanta
- Entonces unos días no van a hacer la diferencia. Díselo, antes de que sea tarde. A nosotras no nos gustan los hombres cobardes.
- No soy cobarde, solo precavido.Veré que hago mamá
- ¿Vas a pasarte todo el día conmigo?
- Si señora Reyna, hoy voy a hacer lo que su majestad ordene.

A medida que me aproximaba a la casa de Lina recordaba la conversación con mi madre. Las noticias del día de ayer me habían dejado desconcertado y tuve que posponer mi "tema" con Lina. Como siempre metí la pata hasta lo más hondo.
Detuve el auto y me dispuse a tocar el timbre. Con la amabilidad que siempre desborda la mamá de Lina, salió a mi recibimiento.
-Hola, buenos días, me gustaría ver a su hija.
- Pase joven. Pero ella no está. Regresó muy temprano y salió- ¿dónde estará metida?
- ¿Sabe si demora?
- La verdad no sé. No dijo para donde iba. Su cara me está asustando ¿pasó algo?
Aparte de que está embarazada y no aparece no sucede más nada.
- No no todo está bien- calmé a la señora que evidentemente estaba preocupandose por mi visita.
-Cuando regrese digale que Sam estuvo por aquí.

Un portazo, al subirme al auto hizo que la mamá de Lina me mirara extrañada desde la casa.
¿Dónde estás Lina? ¿Por qué no respondes? Saqué mi teléfono y volví a llamarla. Al no tener respuestas, le marqué a Thomas.
- Hoy es Domingo, déjame dormir.
- Necesito habalar con alguien y tu me sirves- sabía que Thomas era un madrugador, y que a estas horas ya estaría buscando algo que hacer.
-Auchhh si que sabes hacer que un comentario duela.
- Nos vemos en 30 minutos en Blo's
- ¿En un bar? Es serio lo que vamos a hablar.
Ni siquiera pude responderle. Era seriesísimo.
Thomas llegó primero que yo.
-Desde tu llamada he estado muy preocupado. ¿Qué pasó?
Saqué la silla, dejé caer todo mi peso, solté las llaves en la mesa y luego de un suspiro, dejé salir todo.
-Lina está embarazada- después de un largo silencio, por fin habló mi amigo.
- Ok, eso no lo veía venir. Supongo que te tomó por sorpresa la idea de ser padre.
La sorpresa fue que Thomas supiera que Lina y yo...
- ¿Como sabes que yo soy el padre?
- Porque sé que tu y lina mantienen una relación- con tono burlón siguió diciéndome- Eres muy listo para algunas cosas pero para otras no.
Llegan juntos todos los días, la esperas para llevarla, te le quedas mirando de vez en cuando y te pones a reir cuando ella ríe ¿Sigo?
- Bien, es suficiente.- me sentí como un idiota al escuchar a Thomas, llamé a la camarera y ordené para los dos.- Por favor póngame 2 wiskis- Al darme la espalda, cambié de opinión. Dos no eran suficiente.-Mejor traiga la botella.
- ¿Y entonces que más pasa con Brown?
- Ella y yo llevamos un tiempo viéndonos. Todo sin compromiso y ambos estuvimos de acuerdo- Hice una pausa, era la segunda vez que iba a admitir que sentía algo por Lina.-Resulta que ella me gusta y me gusta mucho, tanto así que quería hacer pública nuestra relación y dejar que las cosas fluyeran. Entonces ayer me entero de que está embarazada.¡Por Dios! Está esperando un hijo mío.- me tuve que contener para no emocionarme más, iba a tener un hijo. -Para colmo ayer fue arrojada al suelo por un paciente y ella se asustó mucho, me pidió que la llevara con Fleming y en ese proceso fue cuando lo supe. La llevé a mi casa porque quería hablar con ella, quiero que nos demos una oportunidad y resulta que se fue, abrí los ojos y ella no estaba a mi lado. La fui a buscar a su casa y nada, no responde mis llamadas... y aquí estoy, sin saber donde está y sin poder hablarle.
- Tranquilo Sam. Lina es una mujer juiciosa y no va a ponerse en peligro.
Creo que deberías darle espacio. Ella debe estar todavía asimilando lo que pasó, ya en esta semana se evalúa y pronto será nuestra colega. ¿Cómo te sientes con respecto al bebé?
- Feliz, no tengo palabras para expresar este sentimiento- se que puse una cara de idiota porque Thomas no dejaba de reírse de mí.-La verdad es que ya lo quiero conocer. Ayer no paraba de tocarle la panza a Lina. Quiero estar ahí para los dos, quiero ser parte de sus vidas, pero se me está complicando.
- Ya te dije que le dieras tiempo y espacio. Imagino que debe estar abrumada.
- Entonces voy a beber para olvidar las penas.
- Brindemos por el papá- y sonamos nuestros vasos.
Después de 2 botellas no recuerdo nada más, solo que estaba en una cama muy cómoda y que no quería despertar. Una arqueada y una punzada en el estómago me hicieron levantarme e ir corriendo a botar el contenido gástrico.
Al volver a la cama estaba Lina mirándome desde la puerta de la habitación.
- ¿Te sientes mejor?
Estaba muy mal. Hacía años que no me embriagaba de esta manera, pero al verla volví a sentir. No sé como llegó, no recuerdo nada, pero me alegra que esté aqui.
- La cabeza me mata. ¿Cómo llegaste?
- ¿No recuerdas que te trajimos entre Thomas y yo porque estabas tan borracho que no podías ni caminar?
- ¿Por qué me dejaste solo?
- Porque si, no quería estar aqui.
- ¿Dónde has estado todo el día?
- ¿ Y eso a que viene?
- A que me pesé toda la mañana buscándote, ¿por qué apagaste el móvil? Lina estás embarazada, si te pasara algo, ¿cómo lo vamos a saber? ¿Has pensado en eso?¿Eh? Estaba muy preocupado.
- Tanto que fuiste a beber- no me sentí orgulloso por ese reclamo.
- Si Lina, fui a beber porque la madre de mi hijo no quiere verme y eso me parte el alma.
- ¿Qué quieres Sam? Estoy cansada, harta. No quiero seguir siendo tu objeto sexual, la mujer que te llevas a la cama por lujuria y ahora no quiero tu lástima porque estoy embarazada.
Sus palabras dolieron, tanto cuando se refirió a ella misma como un objeto sexual como cuando dijo que le tenía lástima.
- ¡Por Dios mujer! Estás embarazada de mi. Esa criatura es de ambos. No puedo creer que pienses que me das lástima.
Todo el malestar de mi resaca y el dolor que me provocaron las palabras de Lina, hicieron que cayera sentado a la cama.
- ¿Sabes cuál fue el punto que cerró mi matrimonio? Elsa salió en estado, ella sola decidió interrumpir el embarazo. Me arrebató mi derecho de ser padre. No sabes cuanto he anhelado un hijo, ahora tu me lo das y me lo quieres quitar.
- Sam, yo no te voy a quitar nada. Si quieres estar en su vida, claro que lo estarás y eso me hace muy feliz. Pero no puedo decir lo mismo en cuanto a nosotros- lentamente se hizo un espacio a mi lado- Si me aprecias un poco dame espacio. ¿No te has puesto a pensar que ni siquiera nos conocemos?
Mentira, si la conocía. Sabía que había sufrido mucho por lo ocurrido con su paciente, que era una mujer tenaz capaz de hacer lo que se proponía; tan obstinada que no se amilanó ni siquiera ante mi; una amiga para todas las personas que tiene a su lado. Su color favorito es el amarillo, le encanta leer y su película favorita es Mulán. Todo esto sabía de ella, pero no la iba a interrumpir.
-¿Qué son muy pocas las veces que hemos hablado de nosotros, de nuestros gustos, de nuestra vida? Este niño va a nacer y sus padres apenas se van a conocer. Mira Sam voy a ser honesta contigo, en estos momentos me preocupa mucho mi examen y quiero dedicarme a ello, quiero ser doctora para cuando mi hijo nazca. Me siento ahogada y necesito espacio.
Ella tomó mi mano y la puso entre las suyas.
-Yo jamás te voy a apartar de tu hijo, no tendría corazón para hacerlo. Descansa y pasa la resaca.
Ahora era yo él que se sentía como cachorro tirado y recogido por lástima. No quería que se fuera.
- Lina estás enferma, tienes anemia y tienes que alimentarte. Deja que te prepare algo- apenas pude levantarme, mis sentidos estaban alterdos.
- Tranquilo, mamá me está esperando.
Nos vemos mañana
- Deja que te lleve
- No estás en condiciones de conducir. Ya pedí un taxi.
- Lina...- apreté su mano para que no se alejara de mi.
- Detente, detente por favor- y se marchó. Caminé como pude detrás de ella, para asegurarme que llegaba bien hasta el taxi.Volví a quedarme solo.