Alay

Prólogo

Última carta: ¿Ha pasado tanto tiempo, eh? La vida ha sido muy dura desde que no estás aquí. Las consecuencias de nuestra realidad, esa en la que alguna vez jugamos, me esta golpeando.

¿Cómo se puede vivir sin ti? Han pasado dos años y aún no sé si podré superarlo, pero lo estoy intentando. Estoy tratando de ser quien era antes de conocerte. He conocido a gente nueva, Max y Veronica.

Sé que esto no te gustará, pero estoy tratando de darme una oportunidad en el amor. ¿Crees que es demasiado pronto? A veces lo pienso, pero no es justo que siga esperando a alguien que no volverá.

A veces imagino que te estás acercando y que somos esa pareja que alguna vez creí que seríamos. Sí, soy un estúpido, ¿verdad? Si leyeras esto, seguro te burlarías y me llamarías idiota.

No tuvimos nuestro final, pero trataré de tener el mío. He pensado tanto en esto, no significa que te vaya a olvidar, pero será un gran paso. ¿Por qué seguir escribiéndole a alguien que no me contestará? Fuiste alguien importante para mí, más de lo que puedes imaginar.

Gracias a ti abrí los ojos, viví una película a tu lado. Así lo sentí, lo que vivimos fue de película. Me arriesgué por mis sueños, me hiciste subir a un escenario y pensé que lo hacías para burlarte de mí, pero lo entendí. Querías que enfrentara el mundo, que me lo comiera, que demostrara mis talentos. Contigo cumplí sueños, y aunque viví cosas malas a tu lado, también me enseñaron a salir de mi burbuja. Gracias por eso.

Aunque no lo creas, fuiste mi primer amor y pensé que serías el último. No diré la tontería de que así lo quería, eras egoísta y nunca me compartirías. Te amé como no tienes idea, pero llegó la hora de soltarte.

Adiós, Bonita.

- El protagonista de tu sueño eterno.