La madrugada de un día en abril pensé en ti

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Se que algo va mal
Y lo sé porque quiero huir
Quiero gritar
Quiero retomar malos hábitos escondidos en lo más profundo de mi ser
Perderme entre el humo y contemplar la ciudad desde las alturas

Que si me dabas libertad, que si no me iba a involucrar, que si quería que fuese diferente, que si, que si, que si.

Que no me merece la pena sufrir
No me merece la pena llorar
No me merece la pena confundirme

O quizá te quiera dar la vuelta
Quizá quiera cambiarte el rumbo
Los planes
Los pensamientos
La vida

Quizá quiera ser un huracán, la tormenta que llegó para marcharse porque no quisiste guardarla y volverla nube

Pero que sabré yo si lo único que me piden mis piernas es correr, el corazón me grita y la garganta se me seca
Si las mariposas del estómago, tan famosas por su cosquilleo, se marchitan y se caen con cada minuto que pasa y más cristales rotos caen

Lo que quiero no lo tienes, no eres Londres o magia en la noche, no eres un banquete decorado al estilo de la novia, no eres promesas bajo la lluvia, no eres una promesa

Yo quiero la libertad, quiero descubrir, quiero gritar, correr, mojarme en las montañas, encontrar nuevos caminos, poner la música alta, encontrar quien me acompañe, quien quiera compartir su tiempo, quién me quiera entender

Y quisiera parar el tiempo
Y quisiera negarle los caprichos a mi corazón
Pero en mi alma arde la pasión
Arden sentimientos erráticos que estallan si sonríes
Y tengo centinelas que echan cubos de agua para prevenir Roma de otro incendio

Porque no quieres y yo tampoco
Porque se que cuando quieras yo no querré
Y cuando quiera tu no estarás

Poesía barataDonde viven las historias. Descúbrelo ahora