Katsuki Bakugo (mejor conocido por todos como lucifer) es el rey y monarca que lidera el infierno.
Sin olvidar la caída y el momento en el que el y sus compañeros más cercanos fueron desterrados; encuentra la gran oportunidad para vengarse de Dios y...
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NARRADOR
Los gemelos tenían dos semanas de haber nacido y honestamente había sido muy agetreante y agotador para la pareja, pues al ser padres primerizos les estaba costando demasiado cuidar y entender a sus bebés.
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====================================== Flassback
En la comodidad de su habitación la pareja dormía con mucha tranquilidad hasta que los llantos de Daiki los despertaron por segunda vez en aquella noche.
--Es tu turno Kacchan --susurro Izuku tapándose la cabeza con la cobija.
El pobre de Katsuki se paró de la cama y le dio el biberón al pequeño pecosito, era muy llorón por las noches, pero cada vez que estaba en los brazos de alguno de sus padres se quedaba dormido de inmediato.
--Al fin te dormiste campeón, pensé que jamás lo harías --susurro el Alfa colocando al pequeño en su cuna, al momento de regresar a la cama junto a su Omega la que lloro ahora fue Dai y suspirando con pesadez nuevamente se encamino para atender a su hija.
Fin del flassback ======================================
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La rutina continuo y mientras Izuku mesia a los bebés en su cunita una duda lo embargo, era algo que queria saber pues le daba mucha curiosidad.
--¿Me preguntó que seran? ¿seran alfas u omegas? --murmuró el pecosito apreciando a sus dos pequeños hijos, ambos dormían plácidamente en sus cunas mientras disfrutaban de la presencia de su madre.
Katsuki entro a la habitación y viendo que su angelito estaba hablando solo junto a sus hijos, se acercó por detrás para preguntar sobre lo que estaba haciendo.
--¿Que estás haciendo manzanita? --le pregunto lucifer abrazandolo por la cintura.
--Kacchan, emm..n-no estaba haciendo nada, solo estaba pensando algunas cosas --tartamudeo Izuku mientras no sabía que decir.
--¿Que cosas pensabas?
--Sonara tonto o muy apresurado pero... ¿Que crees que sean los bebés? ¿Son alfas u omegas? Tu que piensas al respecto --expreso el pecosito viendo fijamente a su pareja.
--Alfas u omegas eso no me interesa, independientemente a la categoría que pertenezcan ambos son fuertes y poderosos y lo son por qué son nuestros hijos --contesto Katsuki.
--P-pero...
--Cuando nuestros hijos estén más grandes sabremos lo que son, por lo mientras no te desesperes lo iremos descubriendo a su paso --dijo Katsuki besando la frente del omega.
Izuku finalmente se dio cuenta de que aún era muy pronto para pensar en aquello y disfrutaría a lo máximo cada momento que pasará junto a sus bebés.
--Cambiando de tema... hay algo que he querido hablar contigo --musitó el alfa sin dejar de abrazar al peliverde.
--¿Que es?
--Quiero que seas mi reina --confesó el rubio sorprendiendo por completo al más bajo.
--¿Eh? E-eso significa que tú y yo...
--Asi es, tu y yo nos casaremos --a completo el alfa la oración del angelito y al escuchar lo que prácticamente su pareja le estaba pidiendo se puso rojo por la pena, ya que honestamente no se esperaba nada de eso.
--Subi y destroce los cielos por ti; lo hice con el unico objetivo de vengarme de mi padre y de mi hermano, quería herirlos y humillarlos mientras te tenía a mi merced; pero... yo acabe acorralado en el propio juego que cree y es que termine enamorado perdidamente de ti y ahora, lucharé contra el y el cielo entero para que jamás te alejen de mi lado, porque ahora tu eres mi reina, la reina del infierno y esto es algo que jamas podrá evitar. Si quiero casarme contigo es para que tú seas mi reina, para que estés junto a mi y gobiernes el infierno a mi lado... nada malo le pasará a nuestros hijos, los criaremos, les daremos mucho amor y veremos cómo van creciendo, pero todo esto lo quiero junto a ti, no quiero desposar a nadie más, solo te quiero a ti por qué mi corazón es prácticamente de tu propiedad Izuku --confesó el rubio sin dejar de abrazar a su Omega, por su parte este se giro para verlo a los ojos y escuchando a su corazón acepto lo que el rey del infierno le había propuesto, no quería regresar al cielo, no quería que nadie los separa, quería estar allí junto a el para siempre.
--Si, acepto, acepto casarme contigo Katsuki --contesto el angelito abrazando y besando a su pareja.
Ambos estaban tan entusiasmados por lo que muy pronto haría, pero su felicidad se vio interrumpida por unos fuertes estruendos que sacudieron el lugar, alarmados por esto los dos salieron y notaron que la barrera demonica había sido destruida, Katsuki no lo podia creer y sintiendo un miedo enorme, le dio la orden a Izuku de no salir para nada de la habitación, pues evitaría a cualquier costo que se lo llevaran.