-Sexto año, casi séptimo-
Bryan Black
La semana de exámenes había pasado y yo no podía estar más estresada, en sí no me preocuparía sacar malas calificaciones, nunca eh sido de buen promedio, pero mi novia me había amenazado, y ahora estaba esperando los resultados, rogándole a Merlín por que sean buenos y Daphne no me castigue, le había jurado que daría mi mayor esfuerzo, pero las promesas no siempre se cumplen. Estaba tan sumida en mis pensamientos qué no me di cuenta del momento en el que Daphne había llegado a mi lado.
—¿Por qué tan tensa, amor?—la sonrisa malvada en sus labios me hizo sufrir, ella se burlaba de mi y mí autocontrol.
—Fui demasiado tonta al confesarte lo qué sentía por ti esa noche—dejó salir una pequeña risa juguetona, sus manos acariciaron mis hombros.
—¿Confesarme qué? ¿Lo mucho qué yo te caliento?—bajó las caricias de una mano a mi entrepierna y suspiré, Daphne detuvo sus movimientos-. Hasta no ver tus resultados no podrás tener de esto...—me apretó sobre la tela del pantalón y yo me removí, levanté la cara y la miré, analizé su vestimenta.
—¿Ni un poquito?—pregunté, con un mohín suplicante puesto en el rostro, llevé una mano a su pierna descubierta y la subí, hasta esconderla bajo su falda, ella tomó mi mano y la quitó de allí.
—Ni un poco—contestó, su voz tan determinada me sometió, entonces resoplé y recosté la espalda en el respaldar del sofá, crucé mis brazos sobre mi pecho y miré estrictamente al frente—. Necesitarás todo tú control-se atrevió a recomendar, tentando la prominente erección en mis pantalones.
—Te aconsejo que quites tú mano de ahí, Daph. En serio—ella sonrió y lo hizo.
—¿Quieres ir a la cocina? Para distraerte, creo que nuestros amigos están allí.
—Claro—me levanté y le extendí la mano, ella la aceptó y salimos fuera de la sala común.
Entramos y observé a más alumnos de los que tenía en mente, había Gryffindor's, Daphne y yo nos sentamos con los nuestros, que nos recibieron en risas.
—Creí que jamás llegarían—Draco dramatizó, Pansy a su lado enganchó su brazo con suyo.
—No es para tanto—Daphne apoyó su mano en la mesa, no vacilé y puse la mía encima, miré de soslayo a Theodore—. Bryan tenía hambre.
—Cuando no,—Pansy bromeó— aún recuerdo la vez que se devoró mi nevera.—Daphne sonrió, también le hice eso a ella.
—¿Se acuerdan la vez qué...—Draco empezó una conversación, yo no puse atención, porque mis ojos conectaron con unos azules al otro lado de la mesa, la pelirroja me analizaba intensamente, le sonreí y ella se ruborizó rápidamente, aún así no dejó de verme fijamente, indagé su figura y bajé un poco la mirada, me enfoque en el escote de esa túnica abierta, el contorno de sus pechos a través de la camisa blanca, humedecí mis labios y clavé nuevamente los ojos en los suyos, fue lo suficiente valiente para entrentarme, se enderezó, dejando a mi vista más que apreciar, mi sangre hirvió cuando la vi morder su labio inferior de una forma sutil y provocadora, ardiente.
Despegué la tensión de ella al instante que alguien a mi lado golpeó mi costado, Theodore había sido el culpable, lo miré irritada, luego me di cuenta de un detalle y guíe mis ojos a Daphne, ella parecía bastante animada platicando con su hermana y Pansy, había pasado inadvertida, suspiré de alivió y tuve miedo de regresar a mirar a la pelirroja de corbata roja con dorado.
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Te Doy Mí Apellido-Daphne Greengrass, y tú.
RastgeleSí te gusta ésta preciosa señorita, éste es tú libro. Una historia sobre Bryane Black y la mayor de las Greengrass, desde inicio de segundo grado, cuando emociones y sentimientos brotan. (One shots) No hay descripción detallada, con el paso del tiem...