𓈒 ࣪ 🪐 ᵂᵉ'ˡˡ ᵐᵉᵉᵗ ᵃᵍᵃⁱⁿ ⭑ 私 ⤾

"Querido Kyle"

Se levantó de la cama, se sentía algo aburrido, se había pasado 45 minutos hipnotizado mirando el techo de madera, pensaba en una sola cosa, o más bien, en una sola persona, Kyle Broflovski, le extrañaba, siempre que el no estaba sentía un pequeño vacío en su interior, se habia acostumbrado a la compañía que el chico le brindaba siempre que pudiera,  que ahora, no verle era doloroso.

No podía hablarle, no podía verle, no podía saber nada de él.

Necesitaba algo que hacer, no podía seguir hundiendose en los pensamientos en los que si podía quedarse con ese pelirrojo, para siempre, donde no había necesidad de un "adiós" desgarrador.

Vio que en el suelo había un pequeño bolígrafo de tinta negra, se había caído del escritorio, se agachó a recogerlo y una vez lo tenía en su mano se le ocurrió una idea.

Si no podía hablar con el, le mandaría cartas.

Se acerco al escritorio y se sentó en aquella silla de la misma madera que el escritorio; agarró un folio de una de las esquinas, en las que se encontraba un gran montón de otros iguales. Penso un poco y luego poso la punta del bolígrafo sobre el papel, moviéndolo para crear letras, dibujando una pequeña sonrisa en su rostro.

"Querido Kyle,

Estas semanas todo ha sido muy diferente, extraño no poder pasar las tardes contigo, espero que dentro de poco podamos vernos :)"

Escribir nunca fue un talento del que pudiera presumir, así que rápidamente se quedó sin que decirle al pelirrojo. Empezó a contarle lo diferente que era todo, lo mucho que mejoraría si pudieran estar juntos y esas cosas que se le suelen decir a un amigo.

Termino su desastrosa escritura y lo dobló con cuidado, luego corrió hasta su madre, preguntándole por sobres, está confundida por la peticion de su pequeño fue a buscar algunos
para después dárselos al pequeño, el cual volvió a subir corriendo a su cuarto, guardo la carta y en el sobre escribió a rotulador.

"Kyle"

Siguió haciendo esto, una vez y otra vez y otra vez. . . No había cosa que le pasara que no estuviera escrito en un papel, luego transformado en carta. Estas no pudieron ser entregadas a su supuesto destinatario, así que quizá, esas cartas eran como una especie de diario, contaba como se sentía, que hacía, que pensaba. . . Todo.

Y así fue pasando el tiempo, ese mismo pequeño que le escribía cartas al pelirrojo se había visto afectado por los años y también por sus propios sentimientos.

Ese mismo pequeño, ahora más mayor, se encontraba tirando en su cama, con una expresión neutra, sus ojos profundos y sin brillo eran decorados por pequeñas lágrimas que caían de forma continua bordeando su fino rostro y aguando de manera incomoda sus orejas, la cual una de ellas estaba decorada por un pendiente circular negro y la otra por un aro ancho junto a otro pequeño más pequeño.

Pensaba escribir una carta, su última carta y probablemente la más dolorosa de leer, si es que en algún momento la llegaba a tener entre sus manos.

Se levantó de su cama perezosamente, cambiando el rumbo de sus lágrimas, las cuales ahora perfilaban sus mejillas pálidas y se unían en su barbilla para luego caer en el suelo frío.

Se sentó en la silla de madera que siempre estaba frente al escritorio e hizo lo mismo que estuvo haciendo por años, escribirle a Kyle.

"Querido Kyle,

Lo más probable es que esta sea la última carta que escribiré para ti.
Y la escribo para disculparme contigo, pedirte perdón por no haber cumplido mi promesa, por no haber vuelto a verte, por no lograr contactarme contigo en todo este tiempo.

Estoy cansado, cada vez me siento peor y desde ya hace tiempo que mi enfermedad empeora, las cosas en casa son igual de complicadas que siempre y ya no te tengo a ti para que me acompañes en todo este escándalo que es mi vida.

Espero no llegues a sentirte culpable por la idiotez que voy a hacer, ya que tu eras una de las principales razones por las que aún seguía aquí, pero eso se acabó hace tiempo y ya perdí la esperanza de que cambie.

Y espero también, que después de tanto tiempo, ya me hayas superado, cosa que yo aún no pude hacer, que puedas seguir viviendo de la mejor manera, mostrando esa sonrisa tan bonita que siempre tuviste y que el brillo en tus ojos esmeralda nunca desaparezca.

Te amo, Kyle Broflovski.

//////"

Una enorme lágrima cayó encima del papel, emborronando la tinta que había usado para escribir su nombre a forma de firma. Dobló el papel con cuidado, tratando de no estropearlo con sus manos temblorosas.

Lo metió en uno de los sobres que tenía allí y como de costumbre, escribió con rotulador negro.

"Kyle"

Lo dejo sobre la mesa, tenia algunas marcas de lagrimas, justo en el centro, podría haber hecho más, para sus padres quizá, pero no lo hizo, se conformo con disculparse con el pelirrojo.