Capitulo cuatro "El comienzo"

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Recordemos que esta es una historia de Tada-Sensei.

Algunas partes son mías. Cada "***************" es cambio de narración.

No olviden votar, comentar, seguirme y recomendarla".





A la mañana siguiente mi despertador sonó como de costumbre. Y yo como de costumbre lo apagué de mala manera. Anoche después de haber escrito aquella carta para Nathaniel, tuve el mejor sueño de que jamás pude haber tenido. 


Aún me sonrojo al pensarlo.


¿Como es qué pueda soñar con él? Lo entiendo, porque me gusta como nadie más en este mundo, pero también sé que nada de lo que pueda soñar o anhelar se podría cumplir. Él y yo somos de diferentes mundos. 


Me levanté con una pereza que jamás había experimentado. Caminé hacia el closet, tomé mi uniforme y comencé a vestirme con prisa para poder llegar a tiempo. 


Como de costumbre bajé las escaleras sin hacer tanto ruido, pero sé que eso es inútil porque papá siempre despierta temprano y hace el desayuno. 


"¿No vas a desayunar?" pregunta a mis espaldas. 


Estoy calzando mis zapatos a toda prisa, tomo mi mochila y doy una negativa con un movimiento de cabeza mientras doy un leve portazo.


El viento golpea mi cara mientras hace bailar mi cabello. Casi vamos a entrar a otoño y el sendero de sakuras  permanece sin follaje desde la primavera. Cuando era niña me encantaba aguardar hasta que las flores rosas adornaran esos senderos, me llenaba el deseo de que siempre fuera primavera para poder admirarlo.


Todos los días por la mañana el tren va tan lleno que es imposible respirar. Pero está vez por alguna extraña razón no me importa el no poder respirar. Dentro de mi sé que son mis nervios a lo que pueda pasar con Nathaniel. La idea que no acepte mi carta me aterra pero alguna vez escuché a alguien decir que tienes que luchar por lo que uno quiere sin importar los obstáculos que se nos puedan presentar y eso es lo que estoy dispuesta a hacer.


Por fin llego al portón del colegio. Consulto la hora en mi reloj, son las ocho menos quince. Y por suerte eso me da tiempo de planear como haré lo que pienso hacer.


Me siento en uno de los escalones de la entrada mientras mi mente empieza a imaginar mil y un maneras de darle la carta que he escrito para él. En donde confieso mi admiración hacia él. 


Faltan al menos cinco minutos para las ocho cuando lo veo caminar por la acera con su inseparable amigo. Parecen tener una interesante charla y me lo pienso dos veces antes de postrarme enfrente de él e interrumpirlo, pero me doy cuenta que sin pensarlo lo hice. 


"Nathaniel..."


"Mmm... te veo en el... adentro Nathaniel" dice el otro chico.

Comenzó con un beso [Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora