Parecía la chica más feliz del mundo, y lo era. Tenía motivos, porque estaba empezando lo que ella misma dijo que iba a ser la aventura más maravillosa de su vida.
-La gente del Club 1D somos como una familia. Aunque todos vivimos en países distintos, estamos siempre en contacto.
-Ya. Seguro que tienen un grupo de Whatsapp, ¿me equivoco?
-Ja, ja. Álex, no te pases de listo, que tampoco es tan difícil de adivinar ¿eh? Te aseguro que no funcionamos como palomas mensajeras - se burló- . Además usamos los teléfonos, el correo electrónico.. En fin, ya sabes, esas facilidades tecnológicas que tenemos hoy en día- añadió con ironía. Sentados sobre unos almohadones, en el suelo, bajo la lona bromeaban y se contaban la vida como si fueran viejos amigos que hacía tiempo no se veían. Como más natural del mundo, como si hubieran estado juntos siempre aunque hacía dos horas se conocían. No se habían dado cuenta de que había parado de llover y de que, repentinamente, el sol había salido y brillado con fuerza. Era una sensación extraña. Sobre todo porque nunca había sentido esa conexión tan fuerte con nadie, y menos con una chica. Sus amigos decían que las mujeres son muy raras y que no hay quien las entienda, porque ellos nunca habían conocido a nadie como Nella.
-La semana pasada cumplí dieciocho años... Ya ves. ¿Cuantos años tienes tú, Álex? ¿De donde eres? ¿A qué te dedicas? Eres periodista, ¿no? .
Era una ametralladora preguntando. Lo quería saber todo de él.
-Espera, espera. Te leo mi ficha enterita: tengo 20 años, nací en Barcelona, al otro lado del Atlántico, y he venido aquí a trabajar. Sí, soy periodista.
-Vaaaayaaaa.. Pues cuéntame, ¿para qué medio trabajas y de qué va tu reportaje? ¡Soy toda oídos! - Nella demostró mucho interés por su trabajo. Le contó sus proyectos como periodista, sus inicios, los meses del becario en la redacción de Global Pop, la gran misión que tenía que cumplir y sus temores de no dar la talla como enviado especial.
-Pero, ¿qué dices, pibe? ¿Es que no confías en tus propias capacidades?
-Sí, claro, pero llevo un susto en el cuerpo que hasta que no haya conocido al grupo y haya empezado con las entrevistas, no estaré tranquilo. A la tirana, quiero decir, a mi jefa, le dije que no se preocupara, que yo podría con todo, pero, entre tú y yo, a veces no me entra el tembleque.
-¿Dices que vas a conseguir una acreditación VIP?- le preguntó ella.
-Sí, eso creo. Ahora cuando regrese al hotel, espero encontrármela en recepción. Carmen, la directora de Global Pop, me ha dicho que ya a hablado con Paul Higgins y que no va a haber ningún problema.
-¿Han hablado con Paul desde tu redacción en Barcelona?
-Sí, con Paul, el mánager del grupo.
-Pues, te acompaño y te lo presento yo misma, que lo conozco bien.
-¿Cómo? ¿Llevo hablando con una cotorra desde hace horas y no me has dicho que conoces a Paul?
-Mmmm.. sí, lo conozco bastante, bastante.
Sonrió con picardía- De hecho, los conozco a todos. Quiero decir a todo el grupo, ya sabes, a Harry, Louis, Niall, Zayn y Liam.
-Pero, ¿qué me dices? ¿Y qué haces aquí en la cola?
-Je, je. Es una larga historia. Te lo cuento por el camino. ¿Vamos?
Se despidieron de los demás y tomaron otro taxi camino al hotel. Aquello era el comienzo de algo. Seguro.
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One Direction: La Novela
FanfictionTrata sobre Álex, joven e inquieto periodista de la revista Global Pop, recibe un encargo de altos vuelos. Su directora le da una oportunidad que no puede desaprovechar: Seguir a One Direction en su gira, que comienza...