El vuelo llevaba un retraso importante debido a las condiciones metereológicas adversas,y los pasajeros y tomárselo con mucha calma. Unas azafatas de tierra bastante amables les dijeron que había que esperar a que amainara el temporal, que les avisarían en cuanto pudiera salir el vuelo.
Tras la sorpresa inicial y unos cuantos abrazos, fue Paul quien sacó el tema a colación.
-I'm very sorry about that. No podía decirles nada por teléfono y tampoco quería preocuparlos más de lo necesario, pero Adriano me ha convencido de que la situación no tenía buena pinta y de que podía tratarse de un asunto más grave de lo que parece. Ya ves que no se ha resignado a quedarse en casa. Ha insistido en acompañarnos en lo que queda de la gira americana.
-Y porque quería estar con ustedes también, hija. -Adriano puso una mano en el hombro de Nella y la otra en el de su prima-. No estaba tranquilo, y ya conoces a tu madre, Nella.- Suspiró rendido a lo inevitable-. ¿Te la imaginas, no es así? Pues eso, que tu madre no te ha parado de insistir hasta que ha conseguido que me viniera para acá. Aunque debo confesarles que, aunque ella no me hubiera dicho nada, yo habría venido igualmente. No podía quedarme despierto en casa estando al corriente de esa historia extraña, de ese peligro, y me he venido a comprobar personalmente la situación.
-Pero papá, ¿para qué están los teléfonos?
-¡Que dices, hija! Tú me conoces muy bien. ¿Cómo podía quedarme tranquilo en casa sabiendo que corres peligro?
-¡Ay, papá! Me parece que estás exagerando un poco; no llames al mal tiempo.- Se acercó y lo abrazó con fuerza-. No te preocupes por mí, que sé cuidarme sola.
-Lo sé, cielo ,lo sé perfectamente, pero el informe que nos has enviado el servicio de seguridad, y aquí está Paul para corroborarlo, no es muy tranquilizador.
Paul hizo una mueca, encogió los hombros y abrió los brazos al mismo tiempo en señal de resignada afirmación.
-Ya me gustaría poder decirles que todo es fruto de una broma, pero me temo que los mensajes son demasiado contundentes y no podemos pasarlos por alto. Desde lo que ocurrió con las torres gemelas de Nueva York, el mundo es un lugar menos tranquilo. Vivimos inmersos en una constante amenaza que, aunque no sea real, y en la inmensa mayoría de los casos no lo es, nos obliga a seguir a rajatabla los protocolos de seguridad. No podemos correr riesgos, Nella, y menos cuando somos responsables de la seguridad de miles de personas. Nella adoraba a su padre. Lo admiraba y lo respetaba por ser porque era el ser más protector del mundo. Dicen que hay una edad en que el papel de los progenitores se reduce a la mínima expresión en la vida de los jóvenes. No era el caso de Nella. Seguía sintiéndose muy conectada tanto con su padre como con su madre.
A todo esto, tenían allí mismo, con ellos, al mismísimo Zayn, que escuchaba en silencio la conversación. Por una vez, no era el centro de atención.
-¡Zayn! ¿Cómo es que no estás con el resto del grupo?- le preguntó de repente Álex.
-Es cosa del departamento de seguridad.
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One Direction: La Novela
FanfictionTrata sobre Álex, joven e inquieto periodista de la revista Global Pop, recibe un encargo de altos vuelos. Su directora le da una oportunidad que no puede desaprovechar: Seguir a One Direction en su gira, que comienza...