𝐌𝐈𝐑𝐀𝐌𝐄║𝗦𝗮𝘁𝗼𝗿𝘂 𝗚𝗼𝗷𝗼

Capítulo 4

—— Yo te podría cargar.

—— No.

   Después de un largo recorrido a pie, al fin tocaron el sucio y ahora apreciado suelo de concreto de la ciudad. La prefectura de Saitama brillaba esa noche del viernes, por más que quisiera ver los anuncios brillantes y coloridos de las calles no podría darse ese lujo debido a su dolor en su cabeza.

   Mantenía su vista atenta en buscar algún hospedaje para ambos hasta el día siguiente.

   Los autos les pasaban por un lado mientras transitaban por la cera iluminada por algunos carteles y faros de la avenida. Satoru por su lado trataba de no pisar las líneas del pavimento en un tonto juego que le hacía creer que dichas franjas eran abismos y si las pisaba caería y moriría.

—— ¿Por qué no usamos tu técnica para llegar a un hotel? —interrogó el albino caminando por delante de ella, apoyándose de un faro de luz—. Sería más rápido y hasta podríamos llegar a la escuela de una buena vez.

—— No es así como funciona. Es un término científico simple pero a la vez complicado que tiene que aplicarse.

—— Con que te apoyas de los parámetros científicos. Que curioso, parte de mis técnicas también implican métodos científicos.

   Lo miró interesada en saber más, pero no se vió capaz de seguirle preguntando y quedar como una entrometida. Prefirió guardarse sus interrogantes y seguir su camino.

—— ¿Y a qué va tu técnica? ¡Esa! La de los hoyos —alzó sus brazos en el aire formando grandes óvalos parecidos a los que vió—. Aparecias de aquí allá.
  
—— Bueno, en realidad serían portales —comenzó a explicar, ajustando su baculo en su hombro—. No como tal en sí, pero funciona de la misma manera con la mínima diferencia de que no traspasa las barreras de la realidad multiversal. Empieza con un punto de partida y uno de llegada que forma un trayecto incierto hasta alcanzar el segundo punto, logrando transportar el objeto —expresó de manera fluida.

   Podría parecer o actuar como tonto, pero Satoru Gojo tenía una inteligencia y comprensión muy elevada para lo que aparentaba. Entendió perfectamente sus palabras y formuló aún más preguntas en su mente que estaba dispuesto a aclarar.

—— Pero, ¿cómo es qué soportas el trayecto? Según tengo entendido, al atravesar esas cosas tiendes a exponerte a radiaciones y cosas así. Alguien débil como tú debió haber colapsado y explotado en pedacitos.

—— Mmm, tienes razón. Lo que sucede con mi técnica es que se guía de las leyes científicas pero logra modificarlas ligeramente. Cualquiera con la cantidad de energía maldita suficiente puede atravesarlo. Un humano sin habilidades de chamán o un hechicero de bajo flujo de energía podrá pasar, se perderá en medio del trayecto y en cuestión de segundos consumiría su propia masa hasta colapsar.

—— ¿Osea que alguien como yo pasaría fácilmente? —presumió inflando su pecho ante la afirmación de la contraria—. Era obvio, nada podría afectarme. Soy estupendo.

—— No me confiaría mucho —burló con una media sonrisa—. Los agujeros de gusano consumen mucha energía de quién los atraviesa. Es por eso que impone la ley en los usuarios de tener el máximo de energía maldita para poder pasar por el. En dado caso que pases por mi agujero de gusano quedarías exhausto la primera vez, te lo aseguró.

   Aquella charla estaba siendo muy fluida, bastante estimulante y a la vez agradable. No es por qué estuvieran hablando solo de ella, sino que, de cierta forma, le agradaba más ese Satoru Gojo que estaba presenciando. Sonrió internamenteante eso, tal vez él no era como lo pintaban los demás.