𝐌𝐈𝐑𝐀𝐌𝐄║𝗦𝗮𝘁𝗼𝗿𝘂 𝗚𝗼𝗷𝗼

Capítulo 16

   5 semanas después...

—— Llegamos tarde...

   Los pasos de ambos jóvenes se detuvieron al mismo tiempo al ver cómo la gente salía de un salón de eventos vestidos de negro.

   Aquellas personas cargaban pañuelos y mantos oscuros en señal de duelo, pues aquello se trataba de un velorio a un difunto; Yuu Haibara.

—— Creo que igual no nos hubieran dejado entrar —terminó de comentar Nanami, que al igual que T/n tenía vestimentas negras.

   Ambos suspiraron rendidos y sin energías, el viaje desde Tokio hasta la ciudad donde vivía la familia de Yuu había sido largo y silencioso. A T/n ni a Nanami les molestaba viajar, después de todo era por costumbre, lo único que no soportaban era el motivo por el cual habían venido.

—— Es una familia grande —dijo T/n, contando en su mente la cantidad de personas que habían adentro.

—— Eso explica por qué era como era...

—— Así es.

   Dieron una última mirada al lugar, T/n fue la única en ver más allá una foto delante de un arreglo de flores, una foto de un joven Yuu en su graduación de secundaria.

   Siguió a Nanami, saliendo del sitio hasta llegar a la calle.

   Las personas pasaban por un lado de ellos así como viceversa, ella estaba perdida en sus pensamientos, el ruido de la calle no era un distractor para las miles de cosas que en ese momento surcaban su mente.

   La principal, era lo reciente, aquel velorio al cual no pudieron llegar era una farsa, una completa mentira para la familia de Haibara, principalmente por el hecho de que lo que estaban velando ni siquiera eran sus restos, ya que los verdaderos fueron exorcizados y confinados según el procedimiento tras la muerte de un hechicero.

   Le vendieron una historia inventada a la familia Haibara, mostrando pruebas de que primero había desaparecido por días, para luego dar la noticia de que el chico andaba en malos pasos y se metió con la gente equivocada, siendo supuestamente encontrado debajo de un puente. Y para colmo, un cuerpo falso al cual podrían llorarle.

    Ante eso se sentía impotente, ¿cómo es posible que algo así sea real? Estaba al tanto de todo eso, pero aún así, no podía dejar de sentir pena por todo aquello. Tanto Nanami como ella se enfurecieron, pues estaban manchando la noble imagen de Yuu, pero muy poco podían hacer viniendo las órdenes desde arriba. Unos hechiceros tan insignificantes como ellos no podrían hacer absolutamente nada.

    No estuvo al tanto de cuánto caminó, o cuantas calles recorrieron, su mente se encontraba sumergida, justo al igual que el rubio, no sabía que pensar ni que decir para acabar con el silencio que los estaba envolviendo.

   Ahora que se daban cuenta, era Yuu quien los unia como equipo y como amigos.

—— ... ¿Quieres comer algo...? —interrogó de manera suave.

—— No, gracias, no creo poder comer en un buen rato —caminaba ahora junto a él, con las manos dentro de su suéter olgado—. Pero si tienes hambre puedo acompañarte.

—— Realmente lo pregunté por ti, tampoco tengo hambre aún.

   T/n giró su vista por encima de su hombro, las calles urbanas de Tokio en septiembre estaban teñidas de un color naranja-amarillento, el viento soplaba casi frío, haciendo que ambos cerrarán sus ojos apenas ante el cambio de clima que se aproximaba.

—— Caminemos un poco, no quiero volver tan pronto a ese maldito lugar —dijo, invitandola a dar un paseo silencioso.

   Seguían caminando, T/n no sabía exactamente a dónde irían, solo se estaba dejando guiar por el rubio quien miraba siempre al frente alicaido, quien parecía caminar con un rumbo exacto en su mente.