Un Peón Caído [ Levi x Erwin x Rochelle ]

030 [ᴇsᴄ 004]

RETURN OF MEMORY
-ʟᴏs ᴀɴɢᴇʟᴇs ᴘᴇᴄᴀɴ-

-Recuerda dentro de dos semanas, saldremos de las murallas.

Rochelle se quedó callada, y luego habló:

-Ya paso medio año desde la muerte de Farlan y Isabel, ¿Crees qué sea conveniente que Levi salga de nuevo?

Erwin se recargó en el respaldo de su asiento. Ambos estaban en la oficina de Smith.

-Ya me había olvidado de ellos dos - poso su mirada en el tablero de ajedrez- No tiene otra opción, ya está dentro de la legión, no puede objetar.

Rochelle no dijo nada. Estaba haciendo un gran esfuerzo para intentar controlar sus emociones.

Smith tomó su taza de té, dándole un trago antes de continuar.

-Ahora nos quedó Levi, él tenía más posibilidades de vivir que los otros dos.

-Farlan y Isabel serían igual que él si tuvieran más tiempo de practica, pero los querías llevar al matadero, ¿no? - preguntó Rochelle.

-Quería ver si se atrevían a degollarme.

-Levi estaba dispuesto en hacerlo, los otros dos estaban más cerca de decirme la verdad de su plan. Si le hubieras dado la oportunidad de contarme, no les hubieras mandado a la expedi.... -fue interrumpida por Smith.

-Levi prefirió el trabajo fácil. - dijo - Así lo decidió él y el destino de sus amigos.

Rochelle lo miro y desconoció esa mirada de Smith... ya no era humana.

-Tengo que felicitarte por tu gran actuación para engañar a ese par de trío. - Smith sonrió con crueldad - Engatusarlos con tu bondad y amabilidad, les dio la confianza de poder acercarse directamente hacía mi.

Rochelle apretó los puños e intentó calmar la rabia que sentía en su interior.

-Gracias, lo hice por oficio.- Forzó una risa- Me despido tengo que preparar a nuestro escuadrón.

Rochelle se levantó de su asiento y, lentamente, se giró. Borrando apresuradamente la sonrisa de sus labios. Antes de que su voz la detuviera, quedando en medio de la oficina.

-No te arrepientas Rochelle, apenas es el comienzo de tu nuevas órdenes.

Ella solo asintió, dándole la espalda.

Antes de salir de la oficina de Smith, se dio cuenta que la puerta estaba semi abierta. Al salir de la habitación, alcanzo a ver una sombra que se perdía entre la oscuridad del pasillo, no sin antes ver el reflejo dos monedas de plata brillando a todo su esplendor mirando a su persona, causándole escalofríos .