8. mentiras

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Spreen y Quackity se vieron el día siguiente en el departamento de Spreen, estuvieron chilleando un rato y viendo películas entre ellos, decidieron no dejar que la relación de sus amigos les afectaran, y se puede decir que la estaban pasando bien, incluso Spreen le dio una llave de su departamento, para que fuera siempre que quisiera.

Se sentían bien, su conexión era fuerte y se sentían destinados el uno al otro.

Pero no todo es color de rosa.

La cosa es que todo era muy lindo para ser verdad, y poco a poco, sus amigos comenzaron a contarles cosas sobre el otro, que fueron haciéndolos dudar sobre si realmente deberían estar juntos o no.

Días pasaban y Spreen y Quackity comenzaron a verse cada vez menos y sus inseguridades iban en aumento.

Llevaban tan poco de conocerse y las cosas ya iban mal.

Lo que facil viene, fácil se va, no?

" Ay no Quackiri, Carre se la pasa hablando de Spreen, me cuenta que aveces dormían juntos y así, sabias eso? "

" Nah amigo, me colgó la llamada Roier ayer porque Quackity lo estaba esperando para salir ellos solos, re triste capo."

Cada cosa, cada "indirecta", les iba afectando inconscientemente, así ellos creyendo que su "pareja" (ya que aún no formalizaban) estaba enamorada de su dicho mejor amigo.

Aunque llevaban tan poco tiempo saliendo, se sentía como una eternidad para ellos, no querían soltarse, no querían dejarse ir.

Pero parecía como si algo los separara, más bien, alguien.

— Oye wey, puedo pasar? — comentó Roier en voz baja mientras se recargaba en el marco de la puerta.

Quackity dejo su celular y se sentó sobre su cama.— Eh si, pásale. — tenía música en su cuarto algo fuerte así que le bajo un poco el volumen.

Roier entro a la habitación y dejo abierta la puerta, no había nadie más que ellos dos en el departamento, Mariana y Aldo se habían regresado a Mexico, pero Roier decidió atrasar su vuelo hasta después.

— Ya se que te ando chingue y chingue con cosas de Carre, pero se me hace que mejor me separare algo de el, y quería ver si me podías dar tips o algo así.— mencionó Roier mientras se sentaba en la esquina de la cama.

— Nombre wey, tu cuéntame siempre que ocupes algo, vente para acá.— dio unos toques en la cama para que se sentara a su lado.

Roier se acomodo quedando sentado junto a él.— Pues es que, verga no se si debería decirte porque involucra a Spreen..— era bueno manipulando.

— Tu cuéntame Ro, no te preocupes.— Quackity le brindó una sonrisa, sin hacerle saber que se moría de los nervios por saber ahora que le iba a contar.

— Pues Carre me dijo que a el le gustaba Spreen, pero que lo rechazó cuando le dijo, pero que se habían besado y algo así no se..— Quackity asintió con la cabeza, oh..— Pero que desde ahí como que Spreen se volvió más cariñoso, como que siempre lo quería cerca de él, y Carre quiso dejarlo ir, pero que no puede, y que siente que siempre le va a gustar y mil mamadas wey, pero lo peor es que el le dice a Spreen que pues ya, ya lo rechazó, pero que lo único que hace es ilusionarlo.

Quackity vio hacia la nada, recordó las palabras de Spreen cuando le dijo que se había besado con un amigo, no mentía, bueno, en eso no mentía, pero eso no lo tenía que saber.

ángel sin cielo. / spreeckityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora