Gojo Satoru | One Shot's

Débil 1.1

El olor a sangre inundaba sus fosas nasales y un tímido sol comenzaba a salir de su escondite bajo aquella cortina de lluvia.

Sus piernas temblaron ante el cosquilleo que iba invadiendo su cuerpo. Aquel pan de miel que desayuno esa mañana en la aldea, amenazaba con salir desde sus entrañas. No podía explicarse el motivo de lo que veían sus ojos. ¿Cómo sobreviviría ahora? ¿Qué haría? Y sobretodas las dudas que nublaban su juicio la última era la peor: ¿por qué ella? No permanecería con vida ni un solo día.

¿La razón?

Era débil. Lo sabía y lo reconocía más que nadie en el mundo. Pero entonces, ¿por qué solo ella había sobrevivido ante la masacre de su clan? ________ pertenecía a una de las muchas prestigiosa familias de hechiceros.

El clan Shimizu era reconocido por su rara técnica maldita.

Siendo demasiado poderosa, aquellos que solo deseaban estar en los altos mandos envidiaban su poder. Todo se trataba de quién era el más fuerte, como para tener a cualquiera a su merced.

Esa tarde, uno de los clanes había planeado desaparecer todo rastro de aquella familia. Al ser un grupo demasiado poderoso, tenían que descubrír la debilidad de estos. Cosa que fue lograda gracias a un traidor; reveló el secreto a una familia que anhelaba eliminar de una vez por todas a los Shimizu.

Pero, habían olvidado a la pequeña ________ Shimizu. Quién fue enviada por su abuelo a un pueblo lejano de Tokio, con la excusa de que trajera algo que él necesitaba.

El hombre sabíamente conocía la situación que se aproximaba, y se aseguraría de que al menos la sangre de su clan permanecería bajo la presencia de esa niña.

Aunque ella era una hija bastarda —del matrimonio de su hijo—, obteniendo un rango menor y un cuerpo delicado a comparación de los demás integrantes. Conocía y heredó las técnicas malditas de la familia. No eran perfectas pero, al menos serían suficiente para mantener vivo el linaje. Además que el cariño que le tenía a ________ era uno mucho más fuerte, que cualquier otra decisión prudente.

Tal vez debió elegir a alguien lo suficientemente fuerte para mantener en alto su nombre, o el mejor en el desarrollo de aquella técnica, incluso a su propio hijo —jefe del clan en ese momento—, pero decidió inclinarse por aquella pequeña de corazón noble y gran potencial.

Jamás se arrepentiría de brindarle otra oportunidad para vivir.

________ negó rotundamente. Lo que estaban viendo sus ojos era digno de una película de horror, vómito tan pronto el olor a putrefacción invadía cada vez más el ambiente. Entonces la imagen de su abuelo sonriéndole llegó a su cabeza. Buscó desesperada entre los cadáveres de su familia, para encontrarse con el de ese viejo hombre que nunca le mostró odio o rencor. La única persona que le dio algo de cariño en aquella desagradable familia. Estaba muerta.

El grito que dio fue ensordecedor. Tan fuerte que desgarraba su propia garganta, tan estremecedor que los pájaros que yacían comiendo los restos de esos difuntos volaron asustados.

—¡Abuelo! —Dijo la azabache llorando en el cuerpo de él.

Mientras sentía su corazón apagarse, revolcarse para luego estallar en un profundo dolor.

...

La pequeña Shimizu recorría las calles con la esperanza de encontrar algo de comida. Se cubrió el característico tatuaje de su familia con esa bufanda rosada que su abuelo le había mandando a comprar.

El sonido de sus pisadas bajó el chapoteo del agua era la única realidad que podía atarla. No le importó que las personas la vieran horrizados por la sangre en su ropa y rostro. Al final, esa sangre le pertenecía a su abuelo. ¿Por qué se quitaría aquello último que dejó?