Un alfa enamorado de una azafata

parte 10: pasión ❤️

-por desgracia no

-esa si que es una mala noticia

-te hablo por que acabo de hablar con mi agente y dice que tiene el contrato listo.

-me parece muy bien

-xandro yo no quiero que puertas dinero por mi culpa por venderlo tan bajo precio, además los muebles que tienen son carisimo no me siento cómoda.

-vamos noah acéptalo, no tiene nada de malo que trate de ayudarte un poco, además no estoy regalándote nada, me vas a pagar con todo.

-xandro sabes que en el precio que me lo estas dando no es lo que vale.

Escucho la voz de una pequeña hablando con el.

-oh xandro estas ocupado y yo quitandote tiempo, que pena con tigo.

-oh no, no digas eso tu nunca me quitarias el tiempo, que tal si te invito a comer y hablamos del apartamento.

-esta bien ¿donde nos vemos?

-te mandare la dirección y aquí te espero.

-muy bien.

Cuelgo y voy y me doy un baño, me pongo un vestido cómodo y un poco de maquillaje, mi cabello solo necesita un poco se crema humentacte y listo.

-hola hija¿pa' donde vas tan guapa?

- voy a comer con xandro ma', voy a hablar sobre lo del apartamento.

-hija ese muchacho es muy guapo y agradable, me cayo muy bien, nada que ver con ese tripa seca de steven.

- hay ama deja de llamarlo así.

-nunca hija, que te vaya muy bien y diviértete, el cuerpo necesita mantenimiento.

-mamá parece que estoy hablando con Andrea, parece que se ponen ee acuerdo ehh

-bueno hija lo siento, pero es la verdad, ati se te nota que hace mucho tiempo no tienes una buena desis de mantenimiento.

-me voy no quiero seguir escuchando esas cosas absurdas.

Mi mamá me mira y sonríe.

- en caso que no vayas a volver, avise.

-MAMÁ!!!!

No puede ser, acaso mi mamá y Andrea se pusieron de acuerdo, aunque en el fondo en solo pensar en xandro desnudo me causa mucho bochorno.

Al llegar al lugar de la dirección me asombro un poco por el lugar que es de comidas rápidas, entro y lo veo muy concentrado comiendo una hamburguesa, esta vestido con una sudadera y una camiseta azul que resaltan sus ojos, creo que siente como me lo estoy comiendo con la mirada por que voltea a verme y sonríe de oreja a oreja.

Se acerca y me da un beso en la boca que me deja con ganas de más cuando se separa de mi.

-Hola mi caperucita roja.

-¿por que me llamas así?

-por que no puedo sacarte de mi mente con ese vestido rojo y literalmente me convierto en un lobo que se muere por comerte.

Yo me pongo roja de lo que el me dijo y el suelta una carcajada como si no me hubiera echo dar pena.

-xandro no puedes ir diciéndome esas cosas porai.

-¿por que no? Que me lo impide.

-la vergüenza, bueno aunque usted no creo que la conozca.

Nos sentamos en una pequeña mesa sin dejar de reírnos, de pronto se acerca a nosotros la pequeña niña con la que yo lo vi en estacionamiento del aeropuerto, tienes los ojos azules como el, pero el cabello de ella es más negro.