Esa había sido una noche muy dura para él, apenas si había consilado el sueño por momentos, pero después podía sentir como su cuerpo era tocado por todas partes, gritaba, pero nadie lo oía y asi se despertaba asustado y gritando por todo lo que pasaba, lo único que lgraba calmarlo era Lucerys, había estado allí toda la noche, sosteniendolo entre sus brazos, diciéndole palabras dulces y suaves en su oído, temiendo que si alzaba un poco la voz volvería a asustarse, así pasó toda su anoche hasta que llegó el momento en que cayó profundamente dormido.
Esa mañana cuando se desperto sintió como su cuerpo estaba bañado en sudor, así que aunque estaba muy cansado intento levantarse pero se le fue imposible hacer tal acción ¿por qué? Primero tenía tanto dolor en todo su cuerpo que hasta mover un solo dedo se sentía como si tuviera mil piedras encimas y la segunda es el alfa que lo está agarrando por su cintura tan fuerte que hacia que sus intenciones de levantarse fueran imposible; observo como el alfa seguía en un sueño profundo pero eso no impedía que sus instintos estuvieran a flote, decidió que lo mejor era quedarse allí quieto hasta que el alfa despertara. Empezó a observar su rostro a detalle tenía unas largas pestañas, su cabello rizado que caía por su rostro no era tan largo, pero lo suficiente para lograr que parte de su rostro sea oculto por estos, también vio como su piel estaba pintado por pequeñas pecas, no eran tan visibles a plena vista pero estaba tan cerca que era casi imposible no verlas, bajo un poco más sus ojos hasta que llegó a sus labios, estos eran gruesos se podía observar como estaban algo secos pero eso no evitaba que dejara de ser algo deseable, inconscientemente mientras miraba sus labios se acercó a su rostro, no sabía el porqué pero el estar así no le parecía suficiente, quería acercarse aun más, de pronto sintió como el alfa empezaba a moverse así que alejo su rostro rápidamente cerrando sus ojos y fingiendo estar dormido.
"Se que estas despierto"- escucho la voz ronca del alfa, normalmente su voz tenía una profundidad a la hora de hablar pero ahora que podía escucharla cuando acababa de despertar era aun más ronca y profunda.
"Lo siento"- se sentía avergonzado, no sabía cuanto tiempo estuvo despierto el alfa o si había sentido el acercamiento que tuvo con él, esperaba que no fuera así.
"No tienes que disculparte"- levanto su mano para acariciar un mechón de cabello que estaba en su rostro para pasarlo detrás de su oreja-"¿cómo te sientes?"
Aemond no sabía que responder, aún recordaba las palabras de Lucerys diciéndole toda la noche que no se preocupara, que todo había sido una pesadilla, que no tuviera miedo, pero el sabía el aspecto que tenía en este momento, no había tenido oportunidad de verse aún en un espejo pero si así le dolía su cuerpo no podía esperar que su rostro y cuerpo estuvieran mejor.
"Cuando estoy a tu lado me siento mejor"- sintió que era lo que debía decirle, lo único que podía decir, no era una mentira, cada segundo a su lado podía sentir el alivio y paz en su piel.
Después de esas palabras sintio como Lucerys solo se dedico a verlo unos segundos, no sabía que era lo que pensaba, solo lo veía nisiquiera podría descifrar que significaba esa mirada, se empezó a sentir nervioso.
"Creo que necesito ir al baño"- necesitaba romper esa tensión, pero cuando intento levantarse sucedió lo mismo que hace unos minutos su cuerpo se sentía muy adolorido, el alfa vio como tan siquiera esa mínima acción le causaba dolor, así que se levantó primero pasando por su lado para después tomarlo en sus brazos y llevarlo al baño, lo dejó en un asiento que tenían allí y salió rápidamente del baño no sin antes darle un último vistazo para asegurarse de que estaba bien.
Aemond río por lo bajo por la accion del alfa, se levantó con la ayuda de los objetos del baño para así llegar hasta el espejo, quedó perplejo al ver su reflejo, tenía morados por todo su rostro se quito su ropa rápidamente solo para ver como su cuerpo estaba aún peor, moretones de golpes por todo su cuerpo, unos más grandes que otro, nunca creyó verse de tal forma, nunca intento buscar problemas, se alejaba de cualquier situación que lo pusiera en peligro y ahora estaba metido en la boca del lobo y su cuerpo era la prueba de que ya nada sería como antes. Decidió que lo mejor era darse un baño así que preparo la tina y se quedó allí un buen rato, le gustaba hacer esto, cuanto tenía mucho en su cabeza para él el agua era como una bocada de aire, lo ayudaba a despejar su mente, por momentos hundía tocó su cuerpo hasta quedar debajo del agua y luego salía, entre esas sumergidas una debió de durar mucho tiempo porque lo siguiente que sintió fue a Lucerys tomándolo de los brazos para sacarlo del agua.
"¡¿Qué crees que haces!?- grito enojado.
No sabía a lo que se refería-"solo estaba tomando un baño ¿no se de que hablas?".
"Si era solo un baño ¿por qué no respondías a mis llamados y cuando entro a la habitación te veo ahogarte?"
Aemond podía ver la desesperación en sus ojos, en su cuerpo y en su voz, se sintió mal por el alfa nunca quiso hacerlo pensar que podría hacer eso, nunca se le había pasado por la cabeza siquiera pensar en tal acto; acercó su cuerpo al del alfa para rodear sus brazos en su cuello.
"Lo siento, no quería preocuparte, solo estaba tomando un baño, aveces me gusta sumergirme pero es para pensar no es nada más"- se separó un poco para ver su rostro-"te lo prometo"- quería calmar al alfa, era lo único que estaba pensando.
Lucerys solo asintió a sus palabras, se dedicaron a ver sus ojos mutuamente hasta que vio como la miraba de del alfa bajaba hasta cierto punto para después desviar la mirada rápidamente, no sabía porque se había puesto así hasta que recordó en la situación en la que estaba hace un minuto, claro se estaba dando un baño así que obviamente estaba desnudo, no lo había pensando por la adrenalina del momento pero ahora había caído en cuenta de su desnudez, procedió a taparse con sus manos lo más rápido que pudo desviando también la mirada.
"Voy a salir"- dijo aclarando su garganta-" te espero afuera, quiero que hablemos de algo".
Asintió y espero a que se fuera, cuando vio la puerta cerrarse soltó un gran suspiró, se sentía avergonzado, nadie nunca lo había visto en esa situación y ahora un alfa que apenas si conocía lo había visto completo, se maldijo internamente por ser tan descuidado, después de unos segundos salió de la tina, procedió a tomar unas de las batas de baño, no tenia ropa así que debía decirle al alfa para que así le diera algo de esta; salió y observo como estaba sentado en los sillones de la habitacion tomando un café y leyendo el periódico, ya habían traído el desayuno para ambos, se acercó a su lado.
"Necesito ropa"
El alfa lo miro de reojo solo para señalar una ropa que estaba encima de la cama, se acercó para tomarla y volver al baño para ponérsela, salio vestido con una sudadera y una camisa; se sentó a su en unos de los sillones para tomar unos de los platos y comerlos.
"¿Así que saliste por tus hermanos?"
Aemond lo miro unos segundos, dejo el plato en la mesa-" lo siento"- fue lo primero que soltó-" no quería huir de ti, te lo juro, solo quería salir a buscar a mis hermanos no sabia como estaban y me preocupe pero después Lyman me encontró junto a Aegon y...- sus palabras quedaron en el aire cuando recordó a su hermano, el mismo que se había arriesgado por el, el mismo que ahora estaba golpeado en algún lugar de la mansión, no sabía si aún estaba vivo o tenía alguna herida grave, sus ojos se encontraron con el alfa, no sabía como decirle todo lo que había pasado y que ahora su hermano estaba en peligro, empezó a tartamudear sin saber realmente qué decir, cuando vio como el alfa se acercaba a él, lo tomó del brazo para que se parara del asiento seguido del que se sentó allí y lo puso sobre sus piernas-" no te preocupes, estás a salvo".
Aemond sintió como las feromonas del alfa empezaba a llenar la habitación, se sintió más tranquilo y así tuvo el valor para decirle-" son mis hermanos, no se donde están ahora ni como están y ayer cuando estaba con Aegon unos alfas se nos acercaron, tuvimos un altercado con ellos y nos golpearon, el que más recibió golpes fue mi hermano pero cuando medí cuenta ya se lo habían llevado, no se donde esta pero se que estaba herido y tengo miedo de que tal vez este muerto o necesite mi ayuda, tengo que ir a buscarlo puede estar en peligro"- empezó a levantarse del regazo del alfa cuando sintió como lo tomaba de las caderas para volverlo a sentar-" ¿Que te acabo de decir"- tomó su mentón para poder verse a los ojos-"si estas conmigo no tienes que preocuparte por nada, eso te lo prometo"- Aemond asintió a sus palabras-" Daré la orden de que traigan a tus hermanos para instalarlo en una de estas habitaciones, ya no estarán allí ¿está claro? Y su alguno necesita ayuda se le dará de inmediato ¿entendiste?-" Aemodn volvió a asentir a sus palabras, no podía creer como es que había dado con este alfa tan especial, se sentía aliviado de tenerlo así que solo se recostó en su pecho para así poder quitar toda preocupación de su mente, solo esperaba que en serio sus hermanos estuvieran bien.
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Hola a todos 👋
Lamento no haber actualizado hasta ahora, pero es que había tenido un bloqueo y por más que quería escribir simplemente no me salía nada, pero prometo ser más constante en las actualizaciones, espero les guste el capítulo de hoy y recuerden dejar sus comentarios, lo quiero 💕
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Mi único Omega
Ciencia FicciónAemond sabia que tendría un destino cruel desde que se presentó como omega y además ser un bastardo de la casa targaryen. El era hermoso, Todos lo sabían pero para lo que algunos era una bendición para él era todo lo contrario, siempre odio su vida...