Simplemente observo. La arena trae recuerdos, imágenes borrosas de tiempos pasados, muertos. Simplemente observo.
Siempre fui un gran observador. He visto tantas cosas... Tantas guerras, y muertes. Tantos amores, tanto dolor, tanta alegría. Y siempre observo.
Me rio en silencio, con tranquilidad, con locura. Sólo.
La luna ilumina el desierto.
Y recuerdo. Esos ojos verdes, brillantes. La transformación, la bestia.
Siempre observo.
Ayer, en la conferencia de la ONU, lo observe desde lejos, tan pacíficamente. Sentado al lado de su hermano y del estúpido de España.
Y siempre observo.
Cuando, durante la Segunda Gran Guerra, los dos hermanos italianos llegaron, la paz fue perturbada y decidí actuar. Mi tierra, Egipto, estaba en peligro; no podía quedarme sentado.
Disparé primero contra el débil, contra Feliciano, contra Italia. Pero... Alguien se interpuso.
Si, así fue: Romano, Lovino.
No solo eso. Se interpuso y siguió luchando, con sus ojos verdes cargados de ira, de necesidad de vengarse.
Y siempre observo... Me enamore de la bestia que yo mismo desperté.
Y las décadas pasan. Y observo, sin ser notado, sin ser llamado, sin ser amado.
Y ahí está, un romance marchito sobre el frío desierto. Siempre observo, siempre.
ESTÁS LEYENDO
Cortos de amor, derrotas y otros placeres. [Hetalia Fanfic]
FanfictionDe amor y otros desencuentros: de lujuria, de esperanza, y de dolor. Cortos de derrotas.