OCHO

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Al entrar a la casa Jungkook sintió el aroma del omega llenar la casa y su alfa se sintió feliz.

Taehyung estaba en la sala rodeado de libros, él siempre estaba haciendo tarea o estudiando, pero el omega no estaba concentrado en sus libros, miraba su teléfono con el ceño fruncido y un leve toque de preocupación se hizo presente en su aroma.

- Cachorro. - habló Jungkook llamando la atención del chico.

- ¡Deja de decirme así! - gruñó molesto, mirando al alfa.

Jungkook se sentía fallecer por esos ojos azules.

- ¿Por qué estás preocupado? - preguntó el rizado sentándose junto a él.

- No estoy preocupado. - mintió regresando su mirada al teléfono.

- Si lo estás, no mientas.

Taehyung rodó los ojos y lo ignoró.

- ¿Estás molesto conmigo? - preguntó el rizado.

El omega rio.

¿Cómo se atrevía todavía a preguntar si estaba molesto?

- ¿Cómo crees que voy a estar molesto? - dijo sarcástico el omega. - ¡Por supuesto que lo estoy! - gritó - ¿Qué ibas a decirme en cafetería?, ¿Qué no debería andar de qué?, ¿Ibas a decirme puta o zorra?

- Yo realmente... - balbuceo el alfa pensando en que decir - Lo siento mucho, no sé por qué actué así. - se disculpó.

- Claro. - murmuró Taehyung.

- ¿No vas a decirme por qué estás preocupado? - preguntó el alfa.

- No. Déjame en paz.

- Te he traído algo. - susurró Jungkook abriendo su mochila, donde había metido la rosa que compró.

Aunque Taehyung no lo hubiera querido sus ojos brillaron de emoción.

- ¿Qué? - preguntó emocionado.

El alfa sacó una rosa roja de la mochila y el omega de Taehyung estaba emocionado y feliz.

"Nos trajo una rosa. Él nos quiere." chilló su omega en su interior.

- ¿Una rosa? - preguntó sonrojado.

"¿No le gustó?, ¡Oh dios, no le gustó!" Se preocupó su alfa "Haz algo para que no se moleste" le gritó.

Pero antes de que el alfa respondiera, el omega tomo la rosa de sus manos y comenzó a olerla.

La imagen de Taehyung con su nariz enterrada en la rosa, con los ojos cerrados y las mejillas sonrojadas, eras de las mejores imágenes mentales para el alfa.

- Es muy linda. - susurró el omega separándose de la rosa.

"No tanto como tú." pensó el alfa.

Taehyung volvió a mirarlo a los ojos y le sonrió en agradecimiento por el regalo.

El alfa tragó en seco y siguió mirando al omega de cerca, cada facción de su rostro, quería grabar en su mente hasta el último detalle de aquel angelical rostro.

Sus rostros se comenzaron a acercar poco a poco, hasta que la distancia entre ellos era mínima, el omega cerró los ojos en un acto de sumisión, aceptando cualquier cosa de parte del alfa.

Jungkook miró fijamente los labios del pequeño, quería probar aquellos delicados y dulces labios, lo quería, lo deseaba.

Lo necesitaba.

Alfa Estupido || KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora