Capítulo 8🌸

76 13 3
                                    

18:34 pm

Jueves 17 de junio

Casa de Yukako, Morioh

Casa de Yukako, Morioh

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


-Vaya que si se escuchó, (T/N) -asegura emocionada Yukako- ¡La cara que puso Josuke fue graciosísima!

Ni me había fijado. Solo estaba prestando atención a la de Okuyasu, cuyos rasgos faciales eran más propios de una estatua de tan petrificado que estaba.

-¡Por fin lo...! -Reimi se rectifica- Digo... Lo siento muchísimo, de verdad, si te entristeciste al pensar equivocadamente que él y yo... Ya sabes, cuando lo acompañé hasta clase... Solo quería aconsejarle, nada más.

Reimi es adorable cuando se disculpa. Le doy un abrazo y la tranquilizo diciendo:

-No te preocupes. Tú ya tienes a tu chico asegurado.

Ojalá no haber afirmado eso. Empiezan a interrumpirse la una a la otra con comentarios que atestiguan que yo también tengo garantizada una relación con JoJo. ¡Con JoJo! Es una locura. Que vale, que está muy bien que se enamore, o crea estarlo, pero desempeño mucho mejor para él el papel de hermana que de novia. En el fondo es consciente de ello, porque hemos pasado toda una infancia juntos sin confundir sentimientos.

-*-

14:32 pm

Viernes 18 de junio

Pasillo, 3º planta Instituto de Morioh, Japón


-Tenemos que hablar. Ha sido un malentendido -sorprendo a Josuke a la salida de clase.

Este cierra su taquilla con un portazo y se precipita a avanzar por el pasillo, esperando a que camine tras él, cosa que no tardo en hacer.

-No es conmigo con quien tienes que justificarte.

Intento seguirle el ritmo, confundida, mientras sorteo al reducido número de estudiantes que se nos cruzan. No estará enfadado, ¿no? ¿Sabe que he mentido a propósito y ahora piensa que lo de ilusionarlo también ha sido adrede?

-Te hemos descubierto, (T/N), aunque a decir verdad había quedado claro para todos menos para ti misma.

-¿De qué estás hablando? Josuke... -estiro de su manga para detenerlo, en vano- No, no, entre nosotros no debe suceder nada.

Se detiene en seco enfrente de una puerta que se corresponde con la de objetos perdidos y no duda en abrirla e introducirme dentro con un leve empujón que por poco me hace chocar con alguien.

-¿Pero qué haces? -fuerzo la manivela hasta escuchar el suficiente número de veces un clic con el que me percato de que efectivamente estamos encerrados- ¿A qué viene esto?

La voz de Koichi resonando en un megáfono nos hace pegar un bote a ambos. Sin pretenderlo, me apoyo en la persona a la que no soy capaz de identificar por la oscuridad y esta me atrapa en sus brazos.

-Sinceridad, por favor -da unos leves toques al micrófono y por poco nos quedamos sordos- ¿Cómo reaccionaste al ser consciente de que Okuyasu tenía una cita?

No me lo puedo creer. Entonces me doy cuenta de que él es quien está encerrado conmigo y me aparto casi al instante en que las piezas comienzan a encajar en mi cabeza.

-Estáis recreando el plan perverso que Yukako nunca se atrevió a ejecutar -frunzo el ceño-. Habéis perdido la cabeza.

-Puede.

Los fuertes sonidos que se producen cuando palpa el micrófono una segunda vez vuelven a taladrar mis tímpanos.

-Me sentó mal. No sé qué más esperáis que diga -la voz de Koichi pide una justificación válida, así que añado:- Estaba deprimida, pero me insistía en que ya se me pasaría.

-¿Y tú, Okuyasu? ¿Cuál fue tu reacción al ver que (T/N) no respondía como esperabas que lo hiciera?

Esto de sincerarnos con el otro no me está gustando nada. En cuanto salga del cuarto voy a matar a Josuke y a Koichi. Mientras planeo cómo hacerlo, Okuyasu da su respuesta:

-Yo... Eh... Seguí con el rollo del plan romántico con Yoshie porque parecía darle igual. ¿Acaso importa? Nada de eso estaba planeado. Es más, no nos habríamos dirigido la palabra de no haber sido por esa improvisada circunstancia.

Reprimo un jadeo de sorpresa y alivio. Menos mal que las luces permanecen apagadas, porque apenas soy capaz de contener una sonrisa.

-¿Querías...? -intento controlar el entusiasmo de mi voz- ¿Querías comprobar si me ponía celosa? ¿Por qué?

-Te recuerdo que soy yo quien hace las preguntas -se dirige a Okuyasu:- Aunque es cierto que merece saber el motivo. Adelante, por favor.

Lo escucho tomar un profundo respiro que le ayuda a recomponerse. Después, me fijo en que acorta la distancia conmigo tanteando la oscuridad. En consecuencia, cada una de mis articulaciones se quedan rígidas e indispuestas a moverse.

-Creía que averiguando lo que quizás sentías por mí, interpretaría yo mis propios sentimientos. Y no ha sido así, porque... Pese a haberte mostrado indiferente a cada uno de mis intentos por conseguir lo contrario, ya los había aclarado desde hacía tiempo. Lo que pasa es que a lo primero cuesta reconocerlo -se queda callado durante unos segundos en los que solo son perceptibles los acelerados latidos de mi corazón-. M-Mira, probablemente lo mejor sea decirlo del tirón y no cometer el mismo error dos veces. Me gustas, (T/N), mucho. No te haces a la idea.

Corazón Acelerado - Okuyasu x ReaderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora