Enamorado de Jhonny II [ DRAMA/LGBTQ+ ]

31 "Mentiras y más mentiras"

¿Por qué debería estar contigo? 

A las 8 de la mañana hubo un accidente en una carretera alejada de la ciudad y de la civilización rumbo a otro estado más pequeño y abandonado, la pareja estaba conversando cuando el auto falló y se cayeron por una pequeña colina hasta detenerse casi al inicio de otra carretera que se encontraba más abajo del sucedido accidente, el hombre iba sin cinturón y el impacto sacó la mitad de su cuerpo por la ventana del auto, por otro lado la mujer no saltó por la ventana pero el impacto le provocó un fuerte golpe en la cabeza dejándola inconsciente por un largo rato.

— ¿Está bien? — preguntó una voz de un chico joven de veinte años, su mamá y sus tías estaban ayudando a la mujer del accidente salir del auto.

— Está viva pero el golpe fue fuerte — anunció la madre, el padre y su tío junto con otros primos estaban sorprendidos viendo el cuerpo del hombre sin vida en el auto, nadie quiso tocarlo porque se trataba de un fallecido, ya habían llamado a la ambulancia y policía después de encontrarlos justamente porque un primo se bajó del auto para hacer sus necesidades.

— Me duele el vientre... — dijo la mujer apenas reaccionando, se llevó la mano al vientre mientras el corazón le latía abrumado.

— Ya llamamos una ambulancia — avisó una señora sosteniendo la cabeza de Sharon.

— ¿Estoy bien? — ella se miró y se percató del accidente de su auto, miró la mano de su esposo a lo lejos casi provocándole un segundo desmayo.

— Calmese, respire — decían las mujeres al sostenerla en el suelo— ya pronto viene la ayuda.

— James... — dijo Sharon entre lágrimas— ¿está muerto verdad? — preguntó sollozando, las personas no pudieron responderle haciéndola llorar— me duele el vientre, creo que me pegué — dijo desesperada.

— No se preocupe ya pronto la van a ayudar.

— Creo que está embarazada — dijo una tía.

— Pero no tiene barriga.

— Sí lo estoy — aseguró Sharon asustada— necesito ir ya a un hospital, me duele mucho — las lagrimas no paraban de rodar por su mejilla.

El dolor que había en su vientre le decía que su bebé había perdido la vida horas antes, aquel accidente le había arrebatado en un solo momento a sus dos amores, ¿cómo alguien podría sobrevivir a un dolor tan grande?, después de eso Sharon tuvo que ir a terapia por un tiempo para poder sobrellevar la pérdida. Lo peor de todo es que al llegar al hospital tenía una pequeña esperanza por su hijo pero no fue así, no pudieron hacer nada al respecto.

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— Creo que debemos regresar el penthouse, no me siento cómodo viviendo aquí.

— ¿Estás seguro? — preguntó Elian algo desanimado, ni siquiera habían podido disfrutar el penthouse por tantos problemas.

— Mi papá y yo estamos peleados y le debo una disculpa a Ellen.

— ¿Vas a regresar con ella?