Acontecimientos antes y después del nacimiento de Bra.
Los hechos serán contados desde mi punto de vista y como creo que sucedieron las cosas.
Personajes: Akira Toriyama.
Temática: Mía
Prohibido copias y adaptaciones.
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Me remuevo incómodo de la cama, la luz del sol golpea mi rostro, pero siento un dolor muy fuerte en la cabeza. Veo a mi alrededor y Bulma no está, solo su lado tiene las sábanas arrugadas.
Cuando estoy por levantarme la puerta de la habitación se abre, dejando ver a mi mujer con una bandeja donde hay un almuerzo estilo americano, junto con un vaso de agua y unas pastillas, la recorro visualmente de arriba para abajo, trae un top negro y unos pantalones militares con unas botas negras.
-Por fin has despertado cariño, ten, tomate estás pastillas, te servirán para el dolor de cabeza y almuerza, tenemos varias cosas por hacer hoy.
-¡Mierda! No sé porque a los humanos les gusta beber en exceso esas cosas si al día siguiente tienes una resaca de puta madre-llevo mi mano hacía mi cien y doy masajes con mis dedos en círculos
Bulma se sienta a lado de mi y se ríe-No escuché alguna queja tuya ayer por la noche, aunque eres muy diferente cuando estás ebrio, eres más divertido.
-¿De qué estás hablando, mujer?
-Decías cosas sin sentido, casi tuvimos sexo, pero yo estaba muy cansada para hacerlo, además de que tenemos planes para el día de hoy, comenzó a sonar una melodía y comenzaste a bailar sensualmente y desnudarte, debo admitir que estuve por caer, pero después tus pies fallaron y caíste al suelo... Aunque en realidad, el suelo ayer era tu mejor amigo y también me dijiste unas palabras tan hermosas-me dice ahora con burla, mientras se ríe
-Yo jamás haría esas cosas tan absurdas, aquí la ebria era otra-le digo sonrojado, algunas escenas de lo que pasó ayer llegan a mi mente y no son nada agradables
-Ajá, si, lo dice el que se bebió tres botellas de bourbon sólo y lo hacías como si fuera agua, mencionaste que Goku hasta era tu mejor amigo y que le tenías cariño, algo me decía que no solo eran aliados.
-¡Maldición, cierra la boca, mujer! Ese imbécil jamás será mi amigo y ni una palabra de esto a nadie, ¿Te quedó claro?-le advierto algo molestó
¿Cómo pude decir semejante estupidez?
Ella rueda los ojos-Sí, si como digas, como veo que tienes un humor de mierda, te esperaré abajo, terminas de almorzar y te duchas que apestas a alcohol, no quiero llegar tarde.
Antes de que pueda rechistar sale azotando la puerta, me tomó las pastillas y almuerzo con calma.
¿Cómo un príncipe de alta clase como yo, se pudo embriagar con bebidas alcohólicas humanas?
Aunque jamás me había excedido así, normalmente me tomaba dos o tres tarros de cerveza y siempre estuve sobrio.
Un recuerdo en peculiar a mi mente...
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Termino de darle el último trago a mi tarro de cerveza a mi lado se encuentran los insectos de Nappa y Raditz.
