Acontecimientos antes y después del nacimiento de Bra.
Los hechos serán contados desde mi punto de vista y como creo que sucedieron las cosas.
Personajes: Akira Toriyama.
Temática: Mía
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En el momento que entre a nuestra habitación, vi a Bulma acostada en la cama con los ojos cerrados, aún portaba su camisón de encaje rosa y las sábanas cubrían por completo su cuerpo. Trunks y yo nos sentamos en la cama, dirigí mi mano hacía su frente y estaba muy caliente. Bulma ante el toque abrió los ojos y me dió una débil sonrisa.
—Estás ardiendo en fiebre, Trunks tráeme una toalla húmeda y medicamento para la fiebre—el asintió y se dirigió rápidamente hacía el baño
Le quité la sábana y por suerte su camisón no era tan revelador, de inmediato ella tembló un poco.
—N-no es para tanto, solo es una calentura, sin importancia.
—Tonterías, ayer el cambio tan brusco de clima debió de haber causado que te enfermarás, por eso insistí en que te bañarás rápido y además estando tapada de esta forma no te estás ayudando en nada.
—Eso no fue lo que me dijiste, recuerdas que te propuse que nos bañaramos juntos y empezaste a...ya sabes—me dijo sonrojada y dirigió su mirada hacía el baño y Trunks ya venía con lo que le pedí
—Aquí está papá.
Asentí y le di el medicamento a Bulma, para después ponerla la pequeña toalla húmeda en la frente, ella soltó un jadeó y su piel se puso de gallina.
—Está helada.
—Es normal tu reacción tu cuerpo está muy caliente, mujer.
—Iré a pedirle a mi abuela que me ayude a prepararle una sopa, recuerdo que un día yo me puse enfermo de más pequeño y eso me hizo sentir mejor.
Bulma sonrió de manera tierna y yo de lado. Me agrada que mi hijo se preocupe por su madre, sé bien que el día que yo no esté el cuidará muy bien de ella y su contraparte me lo demostró, dejando de lado su muerte, Trunks me dijo que el se sentía culpable por eso, la verdad es que no era su culpa, lamentablemente era algo que ya estaba destinado.
Por la mente jamás se me pasó por la cabeza culparlo de la muerte de su madre.
Cerré mis ojos y antes de que Trunks saliera lo detuve con una simple oración.
—Trunks hoy no entrenaremos, cuidaremos de tu madre y si no mejora la llevaremos con tu abuelo a qué la revise.
—¡Si papá! Regreso en unos minutos—salió corriendo de la habitación dejándonos solos
—Nuestro hijo es increíble, es igualito a ti, su manera de preocuparse es la misma, el mismo orgullo y vicio por el entrenamiento, sé que cuando crezca será un excelente guerrero—dijo Bulma con orgullo
—Ya lo es, será igual o mejor que el de futuro, después de todo ambos son mis hijos, aunque tengan vidas diferentes y eso será gracias a mi—sonrió con arrogancia y ella rueda los ojos
—Maldito saiyajin presumido.
—¿Acaso estoy mintiendo, mujer?—mi sonrisa se hace más grande al verla más molesta