Cuando te escojas a ti, verás como se abren puertas y ventanas para que el sol pueda entrar.
Cuando exijas que mereces lo mejor y lo bonito, vas a ver como lo complicado se aleja.
Cuando decidas ponerte en primer lugar, tendrás al otro lado de la mesa a alguien que tenga como prioridad hacerte sonreír.
Cuando decidas tirar a la basura las migajas que has guardado debajo de tu almohada, verás como los amores completos y decididos llegan a tu vida.
Cuando entiendas que la felicidad no depende de nadie, solo de ti misma, sabrás que tu paz emocional, tu risa, tu tranqulidad, tu balance, NO SON NEGOCIABLES.
Cuando aprendas a cuidarte, pedirás que se limpien los pies antes de que entren en tu vida y saldrás corriendo cuando alguien amenace con tocar negativamente tu corazón.
Sé que suena fácil,
requiere de mucha valentía,
pero empieza paso a paso, empieza todos los días amándote un poquitito más.