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Tanto como el mayordomo que los había acompañó en todo ese trayecto también aportó ayudando al compañero de su amo hasta el interior de aquella mansión, había notado a vivas tientas su condición, le resultaba alguien bastante puro, no se veía como una persona corrompida, en cambio podía notar lo alegre, calmado, amable que era, cualquier cosa que hiciera feliz a su amo persona lo hacía feliz. Conocía a ese retoño desde que era pequeño, a pesar de que su edad era mucho más vieja que antes lo consideraba su pequeño hijo, pero sus verdaderos amos le prohibieron decirle "Retoño" o "Pequeño" por qué estaba trabajando para ellos, por ende debía decirles de la misma forma que le decía a ellos.

— ¿Te gustaría tomar algo? — Mencionó HongJoong una vez que ya se encontraban en el interior de su propio hogar, sujeto con bastante firmeza de la mano de su pequeño enlazando ambas al mismo tiempo en que dibujaba una sonrisa de lo más amplia.

— ¡Claro! Me encantaría, por favor — El menor encogió sus hombros por unos instantes.

HongJoong llevó a su compañero hasta uno de los sofás que se encontraban en el interior de la sala ayudándolo a sentarse sobre uno de los sofás que se encontraba en la sala, podía sentarse dónde quisiera aunque prefirió acompañarlo hasta uno que era bastante cómodo el preferido de sus padres, después de todo no se encontraban en casa esa tarde, no era necesario, conocía que sus padres de vez en cuanto se iban de viaje por algunas cosas que sucedía en sus trabajos, su madre era una actriz que viajaba constantemente por el mundo interpretando papeles importantes, su padre era un importante CEO en una empresa de electrónica, debía organizar conferencias, participar en programas de televisión, etc..

Por esa razón es que ellos no estaban la mayoría del tiempo en casa pero tampoco solía agradarle ese hecho porque la mayoría del tiempo se la pasaba solo, no era bueno para un hijo tener que estar en casa todo el tiempo completamente solo, se dirigió hasta la cocina donde se perdió entre las paredes de ese lugar, el mayordomo que se llama Lee Kuang Yui entró junto con su pequeño hijo adoptivo y lo ayudó a servir algo de agua, también era una oportunidad buena para preguntar al respecto.

— Le gusta ese chico ¿Verdad? Puedo notarlo por la forma en que lo mira, y la forma en que sonríe. — Hablo libremente el mayordomo sirviendo dos vasos de agua, llenando una jarra de cristal con suficiente agua y otra de jugo por si desean también tomar algo se jugó, colocando ambas sobre una bandeja dejando todo listo.

HongJoong se cruzó de brazos y recargo su espalda contra el mesón, observando desde su posición al menor a la distancia, se veía bastante lindo tratando de pensar que había en casa rincón, sus movimientos de cabeza lo conmovió de tal manera que en sus labios se había formado una pequeña sonrisa.

— Si, me gusta, estás en lo correcto, nadie nunca me gustó tanto como el me gusta ¿Se nota mucho? ¿Crees que mis padres lo noten? — Aquella cuestión le preocupaba mucho, sus padres al parecer ya tenían a alguien para comprometerse, una mujer de la realeza pero él no quería hacerlo por qué tenía preferencias distintas a las que su padre quería. — Pero mi mayor temor es perderlo, ya sabes que tiene una discapacidad visual, y la verdad no tengo problema con eso, pero, mis padres si se enteran lo primero que le preguntarán es si él quiere hacerse la cirugía para encontrar a alguien que le donde sus ojos, sabes lo imprudentes que ellos eran. — Soltó un bufido e hizo una pequeña mueca.

— Lo sabemos todos los que estamos en esta casa, no se preocupe, no se van a enterar, pero debe de ser cuidadoso al respecto, tener precauciones es una prueba base ahora. — Terminando de decir eso le indico que se fiesta hacia la sala para no dejar solo a su acompañante, el se encargaría de llevar las jarras y también algo de comer.

HongJoong decidió esperarse y también ayudarlo en lo que se requería, de dicha manera de llevó aquellas cosas hasta la sala colocando las bandejas con respectivos alimentos saludables y también las bebidas sobre una pequeña isla en el centro, tomó su asiento aun lado del menor volviendo a sujetar con firmeza de su mano.

— Trajimos unos bocadillos, también un poco de jugo de naranja ¿Aún quieres un poco de agua? — Hizo el comentario llevando la mano enlazada hacia sus labios para besar el dorso e su mano.

Seonghwa agachó su cabeza en dónde supuestamente se encontraba ese pequeño enlace entre ambos, dibujando una amplia sonrisa después de recibir ese pequeño beso sobre su mano, sintió un escalofrío recorrer su anatomía haciéndolo estremecer al respecto, sus mejillas se pusieron un poco carmines por ese sentimiento que estaba experimentando.

— Me gustaría un poco de jugo y unos besos.. — Se avergonzó al decir las últimas palabras, cubrió su rostro con una de sus manos.

Después de haber escuchado aquello el mayordomo decidió dejarlos solos en la sala, por brindarle ayuda a su pequeño estaría vigilando que sus padres no llegarán por el momento, haciendo guardia en la puerta sentándose en una de las sillas que estaban colocadas afuera apuntando hacia la puerta entre algunas ramas como haciendo guardia.

— Mis besos son solamente tuyos, puedes pedir todos los que quieras.— Retiró la mano del menor que estaba sobre su rostro cubriendo ese hermoso rojo que estaba sobre sus mejillas, detestaba cuando hacia eso por qué no podía ver su hermoso color carmín, le resultaba adorable verlo de esa manera además, se veía hermoso. — Ven acá mi pequeño.— Colocó una de sus manos contra la mejilla masculina acariciando su mejilla con suavidad.

La suavidad se aquellas caricias por parte de los dígitos del mayor le hicieron ponerse nervioso, un hipo se hizo presente al mismo tiempo, sus pequeños ojitos brillaban, en todo instante tenía su cabeza en dirección hacia donde se encontraba el mayor, no podía ver si realmente el estaba ahí pero escuchar su respiración chocar contra la propia le daba una sensación cálida y al mismo tiempo reconfortante, trago saliva cuando sintió su respiración cada vez más cerca de la propia hasta que finalmente sintió los labios del mayor contra los suyos haciendo presión, abriéndose un poquito para capturar los propios en un beso suave pero al mismo tiempo siguiendo un ritmo constante con el propio.

Seonghwa intuitivamente rodeo los hombros del mayor en un intento por continuar con aquel beso, sus labios tardaron en responder pero finalmente respondieron al beso de su mayor siguiendo el constante movimiento entre ambos labios, sus ojos fueron cerrándose, aunque ya veía completamente oscuro pero esa oscuridad se había teñido de distintos colores cuando comenzó ese beso, para volverse nuevamente un aviso de oscuridad, estaba tan concentrado en el beso con su mayor que por un instante cuando abrió sus ojos pudo ver un poco borroso.

Le generó un sentimiento de temor que inmediatamente se separó deshaciendo el agarre que estaba sobre los hombros de su ajeno un poco aterrado.

— ¿Qué sucede Seonghwa? ¿Tan mal estuve? — En su rostro se podía ver un poco de la confusión que tenía al verlo temeroso, podía sentir que algo no estaba del todo bien.

— P-pude ver un poco hace un momento.. — Sin duda estaba asustado, nunca le había sucedido tal cosa, era de no creer, tallo sus ojos un poco con ambas manos pero igual que antes, no podía ver nada.

Esto era un poco extraño, no comprendía el por qué había pasado aquello ¿Podría acaso ser que ese sentimiento nuevo que estaba experimentando era la cura para su discapacidad?

Under Your Eyes. "SeongJoong" [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora