Capítulo 5#

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__Mamá... --Miro el rostro pálido de mi madre y toco su mano esquelética, esta fría.

__Amelia... Mamá te contará una historia que puede ayudarte en el futuro -Mamá hace el esfuerzo de abrir sus párpados cansados.

Asiento y me esfuerzo en no derramar lágrimas. Mamá levanta su mano y toca mi rostro.

__ Debes mantenerlo en Secreto -Susurra con voz carrasposa.

__Lo prometo -Respondo.

Mamá da una débil sonrisa.

__Es la historia de una niña inocente que termino convirtiéndose en una asesina.

***

Mi tío pierde el color en su rostro por las noticias de la sirvienta, cae en su silla y se queda quieto con la mirada asustada. Me cruzo de brazos observándolo con interés, la preocupación y el temor en su rostro es palpable, después de todo, son dos grandes familias que se están enfrentado en nuestra casa y él como cabeza, debe salir a confrontarlos, pero ¿Cómo podría con su estatus?
Los Frischer han sido un vínculo comercial muy importante para mi tío y se ha esforzado mucho por mantenerlo, pero tampoco se puede tomar a la ligera a la familia Berguiana, siendo esta la segunda familia más poderosa después de la familia real.

Sonrió disfrutando su miedo ¿Qué se siente Tío? ¿Has podido sentir un poco mi dilema? Pero yo no soy cualquier mujer que se deja dominar por el miedo.

"Nunca pierdas tu orgullo ante un hombre y jamás le entregues tu corazón."

Soy hija de la Baronesa de Sangre, mi madre fue temida y respetada, incluso el mismo rey no tomaba su presencia a la ligera. Si madre estuviera con vida, jamás fuera permitido que esos Duques egoístas y ambiciosos se atrevieran a soñar con pedir mi mano en matrimonio, mucho menos poner un pie en esta casa.

Mi tío esta sudando y sigue sin moverse de su asiento, frunzo mis labios de disgusto.

PATETICO.

Me acomodo mis guantes y enderezo mi postura, camino con paso firme a la puerta pero me detengo un segundo antes de irme y miro de reojo a mi Tío.

__Tu jamás estarás a la altura de mi madre -Le digo lo único que sé que puede afectarle y él levanta el rostro con los ojos desorbitados.

Mi madre es el trauma de mi Tío, es la mujer que amo y la cual nunca le correspondió.

Sigo caminando y escucho cuando golpea su escritorio, a medida que me acerco a la sala de invitados veo a varias sirvientas en la puerta observando la escena que se desarrolla dentro, me cruzo de brazos.

__Si el Duque se entera que están aquí chismoseando, no dudará en cortarles la lengua ¿Debería decirle? -Las Sirvientas dan un salto asustada y se miran nerviosas, se inclinan ante mi y salen corriendo del lugar.

Aspiro con fuerza... mucho mejor.

Antes de entrar a la sala escucho la voz molesta de Esteban y me detengo.

__Edmund, yo siempre he amado a Amelia, tú lo sabes ¿No entiendo tu capricho? Es cierto que es la mujer más hermosa del Reino, pero para ti las mujeres no son un problema, puedas tener a cualquiera, pero por favor, por la amistad que une a nuestras familias, retira tu petición y deja que me case con Amelia, te prometo que cuando tengamos hijos, crearé alianzas matrimoniales con los tuyos.

__ ¿Hijos? -La voz peligrosa del Duque me pone la piel de gallina--. ¿Tú con mi prometida? --. Observo por la rejilla de la puerta cuando el Duque Edmund se levanta y desvaina su espada de acero ¿Cómo puede venir armado a una petición de mano--. ¿El Duque Frischer tiene intenciones de robarme a mi prometida? Si tienes deseos de Morir, solo debe pedirlo.

El Duque Demente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora