II

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 Bruce ocupó una de las camillas de la bahía médica cuando los vengadores habían aparecido con el niño rescatado en la mansión

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 Bruce ocupó una de las camillas de la bahía médica cuando los vengadores habían aparecido con el niño rescatado en la mansión. Estaba desnudo, a excepción del pañal de tela, pero no parecían molestarle las temperaturas frescas que siempre mantenía el área de primeros auxilios.

Por el cabello desordenado como el de un erizo marrón, la manera en la que se encogía en una camilla que era demasiado grande para él y la cara sucia y repleta de marcas de lágrimas, era fácil deducir que estaba muy asustado, a pesar de eso, Bruce tenía que admitir que no había conocido a un bebé tan tozudo en todos sus años de carrera.

—¿Cómo está? —preguntó Rogers.

Los vengadores habían entrado con él en la habitación, manteniéndose en una postura firme en medio de la sala o recostándose sobre los armarios de medicamentos e instrumental presentes allí, como en el caso de Tony.

La criatura comenzó a llorar con fuerza en el momento en el que Bruce intentó tocarlo por enésima vez y no paró hasta que el hombre se conformó con dejarlo de nuevo solo en la camilla. El niño no había soportado que ninguno de ellos lo tocara hasta ahora y realizarle el examen físico se había convertido en un infierno lleno de llantos, patadas e incluso mordiscos.

—Por suerte, Loki no le hizo daño. No hay señales de heridas ni maltrato, pero está por debajo de su peso y puede que tenga un retraso en el crecimiento —comenzó a explicar. Sus ojos reflejaban la preocupación que sentía a través de los cristales de sus gafas—. Sus reflejos y comportamiento general corresponden con el de un niño de diez meses, pero su peso y altura no superan el percentil normal para uno de ocho. ¿Habéis conseguido localizar a sus padres?

—No hay ningún aviso de desaparición que coincida con su descripción en la zona, ni en las inmediaciones —contestó Natasha, habiendo hecho ya su propia investigación por adelantado —. Puede que sea más fácil tratar de sacar la información del mismo Loki.

El resto de vengadores se movieron, incómodos, pero fue Tony el primero en replicar.

—¿Es una broma? No podemos confiar en Loki, jamás nos va a decir la verdad. Shield tiene que tener alguna forma de descubrir de dónde salió. ¡Presumen de ser la organización de espías más sofisticada del mundo!

—No es tan fácil, Tony. Es sólo un bebé y sabemos que sus huellas no han sido tomadas en el registro de ningún hospital de los Estados Unidos, dadas las circunstancias, tampoco podemos esperar que su análisis genético se encuentre en la base de datos.

Era una situación delicada. Por el estado del niño, deducían que venía de una familia vulnerable. Que la madre hubiera parido en casa y que no hubiera tenido seguro médico para llevarlo a un hospital desde entonces era la situación más probable para la falta de registros médicos.

—Realizaré las pruebas de todas formas —intervino Bruce. Al menos tenían que intentarlo —. Si no logramos localizar a sus padres tendremos que entregarlo a las autoridades.

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