Chapter 8

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La indiferencia endurece el corazón y es capaz de eliminar cualquier rastro de afecto.
-Jorge González Moore-

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Aishe estaba mirando a Suleiman, el cual todavía tenía su móvil, Mustafá y Hafsa estaban preocupados. Cuándo el hombre cuelga la llamada le devuelve el móvil a Aishe.

- ¿Que vas a hacer? - le dice Aishe, la cual estaba asustada pero muy pendiente de cada movimiento que hacía el hombre.

Suleiman la mira y luego a sus padres.

- Voy a tenderle una trampa. - dice lentamente, está apretando su puño con fuerza, pensando en su próximo movimiento.

- ¿Sabes quién es acaso? - dice el padre, mirándolo fijamente, analizándolo.

- Es el mismo hombre que secuestro a Yasmin, el todavía la tiene. Y ahora al enterarse de que me voy a comprometer, quiere amenazarla y a sus seres queridos para manipularme con eso. - Los padres se tapan la boca
,sorprendidos, Aishe no se atreve a preguntar quién es Yasmin, estaba demasiado preocupada. Y como si le hubiera leído la mente, contesta- Yasmín es mi hermana.

Aishe se sorprende y asiente lentamente.

- ¿Que pretendes hacer, como le vas a tender la trampa?- dice Hafsa, con preocupación en su voz.

- El piensa que iré solo, sabe que nunca trabajo en equipo. Pero hace poco hice un trato con un hombre poderoso que me puede ayudar, Jason Santoro. - Dice, seriamente.- Voy a hablar con él.

Sale de la terraza, Hafsa se acerca a Aishe y le acaricia la espalda.

- Todo estará bien querida. - dice con una suave sonrisa en su voz.

- Que Allah te oiga. - dice mientras suspira y esperan a que Suleiman hablé con Jason.

Mientras tanto, en el otro lado de la mansión.

- Buenas noches, Señor Santoro. - hace una pausa y habla- Necesito pedirle ayuda con un asunto urgente.

- Estoy para lo que necesite Señor, dígame de qué se trata.- dice el otro hombre desde el otro lado del teléfono, sonaba tranquilo, a pesar de lo tarde que era y las palabras de Suleiman.

- Por culpa de mi trabajo, los padres de mi prometida están en una trampa, se que es una trampa y no puedo arriesgarme a ir solo o mandar a mi equipo... - dice Suleiman que sonaba bastante tranquilo,pero sus ojos reflejaban una profunda preocupación, pero el no podía mostrarlo, tenía que mantenerse firme.

- De acuerdo, mandaré a mis hombres para que te ayuden ¿Cuando los necesitas? - dice Santoro que parecía que estaba buscando unos papeles.

- Antes de las 1 de esta madrugada. - dice Secamente.

- Perfecto, estarán ahí. - dice y Cuelga el teléfono.

Suleiman se gira hacia sus padres y Aishe.

- Voy a avisarle a la policía.- dice secamente y luego mira a Aishe, su mirada reflejaba preocupación y culpa.- Tus padres estarán bien, lo siento por ponerte a ti y a ellos en una situación así.

Aishe asiente lentamente, nunca había visto a Suleiman así, realmente se sentía culpable.

- No es tu culpa, yo sabíaas consecuencias e igualmente seguí con lo planeado. - dice Aishe, manteniéndose firme.

- Es mejor que os quedeis aquí está noche.- Dice Mustafa.

- Estoy completamente de acuerdo con mi esposo.- afirma Hafsa y luego mira a Aishe con cariño - Cuidaremos bien de ti.

La mujer sonríe un poco.

- Muchas gracias. - Dice Aishe entendiendo que es lo mejor en esta situación.

- Te voy a enseñar tu cuarto. - dice Hafsa.

Le señala la puerta para que salga de la terraza, luego sale ella y suben al piso de arriba. Entran en un cuarto hermoso, con tonos diferentes de verde.

- Es hermoso...- dice Aishe con una pequeña.

- Me alegro de que te guste...Ahora te dejo acomodarte.- dice con una pequeña sonrisa.Luego señala hacia una puerta en un rincón de la habitación.- El baño está por ahí.Si necesitas algo no dudes en preguntarme.

Hafsa sale de la habitación y deja a Aishe sola, la cual se tumba en la cama y no puede evitar llorar un poco, se culpa por poner en riesgo a sus padres, por haber aceptado un matrimonio falso con un hombre que no la ama, que ella tampoco ama, ellos nunca se iban a amar, eran tan diferentes. El era un hombre frío, como una roca. Como si no tuviera sentimientos, pareciera que lo que le dijo hace poco solo fue pura cortesía. Mientras que ella es todo lo contrario, ella tenía tantos sentimientos por expresar, pero su timidez y desconfianza hacia las personas, no le dejan hacer eso. Ella es prudente y sabía que no se podía enamorar de Suleiman. Eso es imposible.

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Muchas gracias por leer mi historia, espero que os esté gustando. Intentaré subir más cosas. ¿Pensáis que se enamorarán? ¿Quién lo hará primero? ¿Quién admitirá sus sentimientos antes? ¿Acaso nunca lo harán por miedo? ¿O será esta una pelea entre gato y ratón?

El amor es tan impredecible como impresionante.

No os olvidéis de votar y comentar.
Nos vemos en el siguiente capítulo...

     Alyssa

¿Serás Tú Mi Maktub? Aishe Y Suleiman Donde viven las historias. Descúbrelo ahora