Chapter 15

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Cuando Aishe despierta, Suleiman ya se había ido al trabajo. Todavía no entendía muy bien que había pasado ayer pero de algo estaba segura, si su esposo quería jugar, ella le enseñaría como se hace. Durante el día, hace sus cosas, lee un poco y luego prepara una cena. Cuando Suleiman entra a la casa, ve a su esposa sentada en la mesa del comedor mientras está escribiendo algo, llevaba un vestido azul largo y elegante, unos tacones negros y una sonrisa maliciosa y astuta decoraba su hermoso rostro.

Suleiman da unos pasos antes de estar justo detrás de ella, se inclina y se acerca a su oído antes de susurrar lentamente.

- ¿Cuál es el motivo para haberte arreglado así, Señorita Asghar? - dice el en un susurro, su aliento tocando la piel de Aishe. Un escalofrío recorre su espalda y ella se gira para mirarlo fijamente.

- ¿Debe haber un motivo para ponerme guapa, Señor Kazem? - dice ella antes de ponerse de puntillas y susurrarle al oído. - Y creo que ya te dije que no me llames así.

Suleiman se ríe por lo bajo antes de pasar su pulgar por la mejilla de Aishe.

- Y yo creo que ya te deje claro que no me importa. - dice el, todavía en un susurro, su voz profunda y seductora era algo que Aishe odiaba pero amaba al mismo tiempo.- Deja de jugar a la mala ,Señorita Asghar.Todos saben que eres un amor, no serías capaz ni de matar a una mosca.

Aishe lo mira con el ceño fruncido antes de sonreír con astucia y malicia.

- las apariencias engañan, Señor. Y como se dice, si juegas con fuego te acabas quemando.- dice ella susurrando, sin darse cuenta de que el la estaba acorralando poco a poco contra la pared.

- ¿Ah,si? - dice el, restándole importancia a sus palabras.- Creo que tú te quemaste hace mucho, al haberte casado conmigo.

- Recuerda que las llamas no son capaces de quemar al fuego. Deberías tener cuidado, Señor Kazem, no me conoces y sabes lo peligroso que es eso.- dice ella mientras lo mira antes de que el ponga sus brazos en cada lado de ella, sin que pueda escapar.

- Te ves preciosa en este vestido azul...- dice el, mientras la mira de arriba abajo.- Pero no te favorece fingir algo que no eres.

Dice Suleiman antes de apartarse, dejando a Aishe con la respiración agitada. Ella respira hondo antes de reírse con frialdad y negar con la cabeza.

- No deberías decir cosas sin saber. - dice ella antes de alejarse por el pasillo de la casa, sus tacones resonando por el suelo, marcando un ritmo hipnotizante casi escalofriante. Como si realmente fuera mucho más que una niña buena.

- Ella algún día me va a volver loco...- de el murmurando antes de tirarse en el sofá, sin saber que hacer.

Aishe estaba duchándose y cuando sale de la ducha con una toalla envolviendo su cuerpo, estaba Suleiman viéndola fijamente.

- No se si prefiero como te ves con ese vestido o con esta toalla, querida. - dice el guiñándole un ojo, ella rueda los ojos y lo ignora. - No me ignores cuando te hablo.

Su voz sonó tan... dominante. Que Aishe no pudo evitar sonrojarse.

- ¿Y Que quieres que te responda a eso? - dice ella, su voz tiembla un poco, Suleiman sonríe de medio lado antes de dar un paso hacia ella.

- ¿Porque te sonrojas?- dice el, divertido por la situación antes de apartar la mirada y susurrar por lo bajo- Maldita sea...Se ve tan bien.

Aishe alcanza a oír su comentario y sonrie con astucia.

- Repite lo que has dicho. - dice ella mientras lo mira fijamente.

- Dije que te ves muy bien. - dice el, sin ningún tipo de vergüenza.

Aishe no puede evitar sonrojarse y se va a su habitación rápidamente, cerrando la puerta.

- Oh Allah, ¿Que me está pasando con ese hombre? - dice ella mientras se sienta en su cama.

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Gracias por leer esta historia, no os olvidéis de votar y comentar. Perdonen la espera. ¿Que os parece estás intersecciones de la pareja? ¿Que secretos guardara Aishe? ¿Como harán para aceptar esa atracción entre ambos?

Nos vemos en el próximo capítulo,

           Aly.







¿Serás Tú Mi Maktub? Aishe Y Suleiman Donde viven las historias. Descúbrelo ahora