El arte era tanto su modo de expresión, su mundo interno, como su propia jaula. Aquellas pinturas podían tener colores vivos, pero con el tiempo se habían ido marchitando.
Ya no lo hacía por ella; lo hacía por obligación.
Pero aquella cueva y ese ho...
Lo dejó pasar a su habitación, invitándolo a tomar asiento donde más quisiera, mientras que él agarraba una silla para hacerlo. En su rostro no había más que seriedad. Momentos antes, le dedicó una mirada a Ronen, la cual no tardó en ser comprendida: le tocaba ir a él a visitar a ______.
—Veo que tiene un nuevo pasatiempo, tío Hades.
Dijo tras observar el cuarto y regresar a ver las pintas de su familiar, pintas muy humanas.
—¿A qué te refieres?— preguntó antes de poder delatarse con cualquier cosa que dijera.
—Pasea por el mundo humano, ¿cierto?
—A veces— indicó indiferente, echándose hacia atrás en su lugar.
—Sinceramente es algo que me ha llamado mucho la atención— dijo alzando la mirada hacia arriba, posando una mano en su mentón y la otra cruzando su pecho —. Hace ya unas semanas lo vi vistiendo igual y camino a una de las entradas del Inframundo. ¿Hay algo afuera que sea interesante?
Volvió a verlo, arqueando una ceja.
Hades sabía que no debía dejarse guiar por el juego por el que quería caer su sobrino. Sabía cómo direccionarlo hacia otro punto. Seguramente sospechaba de que se estaba relacionando con humanos, o algo por el estilo.
—¿Por ser el rey del Inframundo me está prohibido apreciar la naturaleza del mundo humano?— cerró por momentos sus ojos para estirar su cuello que sentía tenso por la situación —El Inframundo es la misma vista desde hace siglos, por eso salgo a ver otros panoramas, un poco más vivos.
—Que el ser humano va matando— agregó repentinamente, de forma tranquila, provocando que su tío volviera a abrir los ojos.
—Por eso apreciarlo antes de que sea tarde.
—Por eso en dentro de unos cuatro siglos, habrá otra asamblea para decidir el destino de los humanos. Por como van progresando, llego a imaginar cuál será el resultado. ¿Asistirá, tío Hades?
—Lo veré en cuatro siglos— respondió con una pequeña sonrisa —. ¿Hay algo más que quieras saber?
—Esa era mi duda... Aunque ahora que lo veo vistiendo así, a parte de imaginar que estaba por salir, debe de relacionarse con humanos, ¿cierto?
—Si un humano me ve con mis vestimentas habituales, ¿no crees que llamaría la atención?— Hermes asintió pensativo a lo que dijo —Deseo tranquilidad cuando salga a admirar una pintura tan viva...
Automáticamente, sus pensamientos relacionaron las palabras con ______: era como una pintura que mostraba la cúspide de la vida, más si estaba en la flor de la misma.
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—De hace días que no te veía— mencionó la muchacha mientras sonreía tras ver a su amigo sentado allí.
—Lo mismo digo— asintió animadamente el guardia para ponerse de pie y así ayudarle con todas las cosas que cargaba —. Hades no me contó que ya habías comenzado a pintar el cuadro.
