𝓞𝓷𝓮-𝓼𝓱𝓸𝓽𝓼 |scaraᴋazu and ᴋazuscara

.𝙲𝚊𝚏é, 𝚙𝚘𝚛 𝚏𝚊𝚟𝚘𝚛.

¿Qué más puedo decir? Tan solo agradecer a Nahida por ese día que me dió sin darse cuenta.

¿Por qué?...No lo sé, pero sé ese lugar era mucho más interesante de lo que alguna vez imaginé a una cafetería "común y corriente", aunque no era la cafetería mismamente.

Paro de caminar y ella se colocó en mí vista.— ¡Scara! Oh, vamos...deja de estar así. Solo quería que se llevarán bien...No es tan mala tu madre ¿Sabes? — Dijo ella con un tono suplicante. ¿Cómo quería que reaccionará? Luego de que esa mujer piense que la perdonaría así por así, con un simple "perdón".

Rodeé los ojos. — Supongo, pero no creas que me lleve muy bien con ella luego de todo.— Respondí.

— Es tu madre, Scaramouche. Pero al menos trata de ser bueno con ella ¿Vale? — Habló mirándome tan expectante...¿Qué quería que respondiera?

— Trataré, pero no prometo nada Nahida. — Respondí para luego desviar mi mirada, ella hizo mucho por mí...tal vez solo está sea la manera de agradecerle.

— ¡Eso es! Eres muy bueno Scara. — Dijo con una sonrisa y luego solo seguimos caminando hasta un punto.

Ella paro con una sonrisa y rápidamente me habló lo más alegre posible.
— ¿Podrías por favor comprarme un capuchino de esa cafetería? ¿Scara? — Dijo Nahida, señalando la cafetería. Esta última estaba decorada con muchos encajes de flores entre otros. Nada interesante...¿Verdad?. Continúo. — Por favor, yo no podré porque tengo que ir a buscar algo que me tomará mucho tiempo y quizá no logré conseguir un capuchino...

—...— La mire detenidamente pensando en si decirle un si o un no en respuesta. Definitivamente no podía decirle no se veía tan alegre tan solo por ese hecho.
—...Está bien. — Respondí al final.

No era algo complicado después de todo y ayudarla me hace sentir mucho mejor.

— ¡Gracias! Uh... perdóname por dejarte ahora, pero iré a buscar cerca de aquí lo que necesito ¿Vale? Así que me estarás buscando por...¡ahí!— Señalo un lugar en el cual habían varias tiendas.

Asentí y vi como ella se iba a la dirección a la que había señalado, ahora tan solo yo me dirigí a la cafetería.

Por un capuchino...

Al entrar la campanita sonó, solo era una alerta para los trabajores del lugar que un cliente nuevo llegaba, nada importante.

Más solo me acerque a dónde estaban atendiendo, mientras veía a mi alrededor. Al parecer tenían mucho trabajo... habían muchas personas ¿Era una cafetería conocida?

Cuando llegue me acerque a la persona que atendía era un chico de pelo corto de color verde oscuro con mechas de color verde claro y ojos que pasan del marrón al verde

Hablé de la manera más formal posible mientras lo veía.
— Puede servirme un capuchino, por favor. — Si debo estar en una sociedad como esta...al menos debo ser respetuoso, aunque lo odie.

— Oh, claro. Espere un momento por favor, mientras tanto puede sentarse. — Dijo aquella persona. Se veía algo apresurada...¿Y cómo no? Tenía a muchas más personas a las que atender.

Solo asentí y me dirigí a sentarme algun lado de esa cafetería, no tenía porque ser el centro de atención.

Pero mientras lo hacía, me tope con otro chico que al parecer pertenecía a la cafetería. Solo fue un cruce de miradas...nada más...pero ¿Por sentí que pasó un lapso de tiempo más largo mientras lo veía? Mientras veía sus ojos...y el los míos...

Tenía unos ojos carmines...¿Por qué me sentí en paz cuándo los ví? ¿Por qué me sentía así?

Cabello de color rubio platino y un curioso mechón rojo en un lado de su cabello. Su pelo estaba sosteniendo apenas por una liga.

Se vería bien...si no fuese porque tenía una expresión de nervios y desesperación en su rostro tal vez sea la cantidad de gente que tenía que atender, pero apesar de eso... sonrió en cuanto paso aquel cruce de miradas.

¿Por qué hizo eso? Era muy estúpido...

Desvié mi mirada y fui a sentarme en algún lado. Tan solo me quedé a esperar unos minutos mientras pensaba en lo que había acabado de ocurrir...¿Quién era ese chico?

No podía parar de pensar en eso.

Fruncí el ceño ante la idea de interés. ¿Qué podía hacer que sintiese curiosidad por ese chico? Oh, vamos hay mucho que enumerar, si no mintiera. Esto es tan ridículo.

— Aquí tiene. — Una voz sonó, dejando enfrente mío el capuchino que había ordenado. Mierda ¿Por qué olvidé que debía ser para llevar? Hice una mueca de molestía dirigiendo mí vista al que me había traído el capuchino. Tan solo ver sus ojos me hizo cambiar de expresión...— ¿Desea algo más? — Sonrió esa persona.

¿Por qué tuvo que sonreír? Oh, que tonto.

Fruncí el ceño algo molesto conmigo mismo y luego respondí con una media sonrisa. — Otro capuchino, pero para llevar...

Aquella persona solo se vió algo nerviosa.
— Vale...uh ¿Nada más? — Dijo anotando lo que había dicho en una libreta que llevaba. Solo asentí mirando más a esa persona...era cierto, era muy interesante. Quizá me haya quedado como un estúpido mirándolo de es manera...

Dejo de anotar en un punto y dirigió su vista hacia mí y sonrió ¿Tenía algo que decir? Parecía que si, pero no se atrevía a decirlo...o eso creía.

— Ah...¿Pue-...?

Antes de que puediese continuar una voz se escuchó y este fue interrumpido.
— ¡Kazuha, Ven!— Dijo la voz, que logré reconocer porque fue la misma voz que me atendió al inicio.

Suspiro pesadamente — Perdóname, disfrute su bebida ya le traeré su orden en unos minutos. — Pronunció...¿Kazuha? Viéndose algo nervioso para luego irse.

Oh...¿Se llamaba “Kazuha” entonces?

Dirigí mi vista al capuchino que tenía enfrente que supuestamente era para llevárselo a Nahida, pero me olvidé de ese detalle...

Suspiré molesto, y agarre el capuchino. No había de otra más que tomarlo.

Pasó un tiempo más mientras terminaba ese capuchino y pronto vi de nuevo a ese peli rubio platino. Traía consigo el otro capuchino que había pedido...

Lo dejo de nuevo enfrente mio y sonrió para hablar.
— Aquí está, y perdone por la demora...en total son once dólares.

— No hay problema. — Dije sacando los dólares que tenía en uno de mis bolsillos. — Y...aquí tiene.— Le entre en su mano.

Este solo me miro tomando la plata entre sus manos y asintió, para luego recoger la taza de capuchino que ya había terminado entre sus manos y antes de irse dijo algo.

— Espero que haya disfrutado de su capuchino...pero ¿Quiere algo más que eso? Veo que quiere algo más que un simple capuchino tal vez pueda dárselo. — Dijo para luego reír suavemente y girar sobre sus talones e irse.

Dejándome completamente confundido...

Más solo yo también me fui algo desconcertado. ¿Por qué dijo eso? ¿Qué pensó?

Me encamine de nuevo a buscar a Nahida entre las tiendas, debería estar por algún lado...debo entregarle su capuchino...tal vez vuelva a esa cafetería.

...
Espero que les haya gustado y perdónemen por la demora, además de lo corto que fue este One-shot, pero eso tiene una explicación.

Es probable que tenga su segunda parte...

¡Bay!