Cartas de Andrómeda

Atardecer

Creo que ya estamos en la hora nona. Mira ese hermoso cielo. ¿No crees que los sentimientos son así? Todo es calma, paz, pero siempre puede cambiar. ¡Qué maravilla, ¿no?

Mira ese cielo despejado, claro y bello, como una vida. Todo nace (amanecer), crece (atardecer) y muere. Ese cielo muestra nuestra vida, al igual que nuestros sentimientos. Nos cobijan y nos muestran ese paisaje claro. Se podría decir que es la bella representación de los mejores sentimientos humanos. ¿No lo crees?

Pero mira con atención. ¿Ves esa nube tormentosa? Pues ahí se encuentran todos los males, o al menos esas emociones negativas. ¿Quién diría que algo así de hermoso oculta esto?

No hemos hablado mucho, ¿no crees? A veces pienso que me dejaste abandonado. A veces pienso que lograste salir de ese agujero. A veces pienso que cogiste tus cosas de la cochera y te fuiste. No sé si te llegarán estas cartas, o al menos no me gustaría que alguien más te las entregara, porque ¿quién mejor para entregarlas que yo? ¿No lo crees?

Sabes, ayer leí una gran historia. Tal vez no conozcas este nombre, pero el libro "La mamá" es una belleza. Muestra la lujuria y los males de estos seres pensantes llamados humanos.

A partir de ahí, me puse a pensar cómo todo se va, hasta que tú te irás y me abandonarás algún día. También logré entender que todos esos pasos del mal nunca llegarán a ser tan profundos.

Para finalizar, quisiera decirte que me llegó una carta de... ¿Qué quieres que le diga? ¿Crees que sería prudente decirle la verdad? ¿Crees que logrará entender al otro yo o tal vez se asuste como tú al principio?

No importa, ya veré qué haré.

Con cariño, Andrómeda